Vagabundeando en Finlandia (mision de reclutamiento de Black Sky)

¿Que pasa?..... mi reloj..... esto...... sera que puedo usarlo como el señor...... deveria intentarlo.....- mirando su reloj, este habia cambiado, ya no era un reloj dorado, ahora era negro en algunas partes ya que aun hay secciones doradas, de pronto hay una exploción detras de mi- No, no puedo- invadido por el miedo- pero, si quiero defender a alguien, no puedo ser asi, devo balerme por mi mismo, devo lograrlo, no puedo esperar a que el señor venga, si espero, morire antes de lograr nada- sujeta firmemente su reloj, este termina de cambiar a un color negro.

Corre rodeando un pequeño cendero y escala unas cuantas rocas, luego de esto, se lanza hacia donde esta el akuma lanzando un golpe con su reloj, el cual solo logra hacerle un rasguño, el akuma retrosede por el golpe y se va hacia el bosque, yo por mi parte, cae de espaldas sobre las piedras y su reloj regresa a la normalidad, aunque no me puedo levantar por el golpe, asi es que desido intentar arrastrarme a un lugar mas cercano a la ruta antes indicada por mi maestro

En plena carrera, veo una sombra que se dirige hacia mi a gran velocidad, en eso saca su pincel y su cruz -Inocencia Actívate, Creador de Edén- Una gran luz de mi cruz comienza a rodearme y mi pincel también tenia un brillo que parecía estar en forma de espada o algo así. Así que salio una muñeca blanca de gran tamaño que, no pasaba el segundo, contuvo el ataque del akuma. -Exorcista, a ti te estaba buscando- Mirándome con una sonrisa diabólica-¿Yo?, para que me quieres- Le pregunte -...... espera..... tu no eres- con una cara de sorpresa. Así que retrocedo rápidamente y se fue en dirección a la montaña.

-¿Que quiere el akuma de mi hijo?- Preguntándome una y otra vez. Así que mentalmente le ordene a mi muñeca blanca que me cargara para ir mas rápido y a parte por que la edad no me permite estar corriendo como si fuese un adolescente. Así que me cargo y me comenzó a caminar hacia la montaña en medio del bosque, como si de un jardín se tratase.

Yo veia como pasaba el tiempo, poco a poco podia moverme mas y dejor, dejando de dolerme un poco el golpe, pero de todas formas, no dejaba de cojear, me lastime un pierna, o eso creo- pero, le dije a mi maestro que subiria la montaña, debo llegar, esto, solo es una prueba, llegar rapidamente, y una vez hay, tendre que pensar, meditar, he podido verlo, mi reloj ha cambiado, pero, no fue a voluntad, tengo que controlarlo, si no lo logro no sere mas que una carga, pero, si lo controlo, podre proteger a las personas que me rodean- sigo caminando por la montaña, a veses recargandome en las rocas para descansar mi pierna un poco, pero sigo subiendo......

Estaba comenzando a llegar en donde estaba mi discípulo, desde arriba de mi inocencia, veía como me acercaba a las montañas que anteriormente le había señalado ir. Sin embargo, el espeso bosque que, no solo rodaba a la ciudad que en donde estábamos si no también a mi y a mi muñeco blanco gigante, comenzaba a desaparecer de repente, empezaba a terminar para dar paso a las rocas de donde, quizás, estaba mi discípulo.

Sin embargo, las cosas no eran de color rosa muchas veces, no siempre se veía de la misma manera que parece, es lo que pasaba hay, los arboles comenzaban a salirse de donde estaban –hee..??.. ¿Mas Akumas?- Decía yo sorprendido de que estos supuestos arboles comenzaban a camina, golpearme cuando llegaban a las piernas y tratando de escalar al gigante blanco. Mentalmente comience a darle órdenes a mi inocencia para que no se dejara invadir ante estos demonios. A continuación, el blanco respondió mi orden y comienzo a golpearlos y a sacarlos de sus piernas como si fueran unos insectos haciendo que explotaran muchas veces con el contacto de sus manos o simplemente llegaran al suelo para quedar ahí inertes.

All ver a mi hijo en las rocas, parecía estar un poco herido que quizás por la forma del terreno o quizás algo peor, el ataque de un akuma, -Hijo ¿Qué te pasa?- el pregunte de repente mientras mi inocencia me dejaba con sus manos al suelo para ir tras el -¿Cómo te ha ido el viaje?- Preguntándole preocupado si había hecho bien o no llevarlo a ese lugar.

que..... no logre llegar a donde me dijiste..... si tan solo hubiera podido usar de mejor manera mi reloj....... no lo logre..... no pude hacer lo mismo que usted, apenas logre golpearlo.......

Me deje caer al suelo para descansar un momento mientras veia el cielo- pero, pude golpearlo- enseña una sonrisa, mientras se frota un poco la pierna izquierda- jeje, aunque me lleve un golpe en la pierna por descuidado, olvide donde estaba y me lanze sin pensarlo, jeje

tome aire y lo retube un momento- maestro...... como llego aqui....... e...... ¿hijo?-le dice a su maestro, y luego piensa- es raro que me digan asi.... pero que bien se siente

-yo quiero mucho a mis discípulos, tanto como si fueran mis propios hijos- le comentaba mientras veía el cielo anocheciendo con una sonrisa –ven- le decía para ir a campar algún sitio.

Paso varias horas cuando la luna iluminara en donde estábamos y mas para preparar un pequeño campamento, hice un fuego con algunas ramas que estaban en el camino, y dos rocas servían de apoyo para que nosotros nos sentemos. Era un campamento común, solo el fuego y donde apoyarnos así que puse un libro como almohada y una roca para elevar más mi cabeza. –Duerme bien hijo, que mañana tendremos un gran día- mientras dormía graciosamente por algunos ronquidos que tenia

Al escuchar todo lo que mi maestro desia, me sentia feliz, entonses, esperar, mañana.... sera..... un.... gran dia....... bostese y quede dormido

En mi mente se repetia lo que habia pasado ese dia, una y otra vez, no se porque, pero siento que puedo empezar a manejar el reloj.

Me lebante en la mañana, viendo un cielo azul sobre algunos arboles, escuchando el canto de unos cuantos pajaros– aaaaaaa, que bien dormi

Escuche a mi hijo levantarse de su largo sueño después que yo también había amanecido bien después de esa noche, aunque me quede pensativo lo que dijo el akuma de ir a mi discípulo, no comprendí por que no ha estado aquí.

El lugar era tranquilo y muy hermoso para que sea una simple montaña asi que me dirigí a mi hijo con cariño -Sky-kun, a partir de ahora empieza tu entrenamiento, así que prepárate lo que vendrá después para poder saber el por que tu inocencia no ha sido activada- le dije con una sonrisa mientras iba ha él. Estire la mano para que se apoyase a levantarse y así comenzar el entrenamiento. Después, camine hacia más arriba a la montaña tranquilamente. De pronto, sale un akuma gigante saliendo de una cueva que se encontraba delante de nosotros –Exorcistas- Decía el monstruo.

que.... eso es lo mismo que la otra cosa? es enorme

me quede asombrado de esta cosa, era mucho mas grande que los mounstros que habia visto antes, y este, podia hablar, cosa que no habia notado en los otros.

Maestro, enserio este es como los anteriores, el.... podemos matarlo de la misma forma no es asi?

tome mi reloj con cierto temor por lo que habia enfrente de nosotros, me consentre lo mas que pude en mi reloj y en lo que habia pasado el dia anterior, el reloj prendio una llama pequeña y crecio un poco, pero era mas pequeña que el reloj que habia visto el dia anterior, no era tan impresionante como lo de ayer, pero, no entiendo el porque

-Mira Sky-kun, mira exactamente lo que hare y no te distraigas ni un segundo- Le dije al futuro exorcista, para que vea lo que hare a continuación –INOCENCIA, ACTIVATE. FABRICA DE EDEN- Dije gritando mientras mi pincel y mi cruz me rodeaban con su gran luz, y haciendo arte con la tierra para formar lo que seria una gran obra de arte que, con mi inocencia y yo, habíamos formado en nuestro pacto de ser aliados de Dios.

Una gran muñeca de color blanco salió de la tierra a causa de nuestra invocación, esta era, por así decirlo, la obra de arte ya antes mencionada, criatura, que por órdenes del señor, vino a salvar a los mas inocentes con el arma mas pura que dio a los apóstoles, la inocencia.

Siempre hay dos cosas que se contradicen de uno a otro, blanco y negro, aire y tierra, bello y feo, bien y mal. Por ello estaba ese monstruo, ese demonio, ese Akuma; que venia a destruir a los apóstoles y así ser más fuertes. En ese egoísmo profundo y mandado por él conde milenario. Le hacia caminar hacia nosotros con las intenciones mas asesinas que cualquier otro ser que haya a la redonda, saliendo de la cueva, como si tratase de un depredador que quiere sorprender, de alguna manera, su presa.

El gigante negro se atrevió sin bacilar a atacar a la muñeca, y con un golpe con su puño, golpea al blanco. Sin embargo, este, no se iba a dejar fácilmente así que agarro la mano con lo que le había golpeado y jalo hacia si mismo haciendo que el negro, no pudiendo resistir ante la fuerza de su oponente, se deja caer ante sus brazos y, aprovechando esta oportunidad, mi inocencia lo golpea fuertemente sin compasión alguna –aaaahh- Gruñía el monstruo una y otra vez por el intenso dolor que le había provocado. –Evil Star Gita- Dijo el agitado y dañado Akuma y unos látigos de color morado salieron del él haciendo que destruyese varios arboles y numerosas rocas del lugar –Hijo, es mejor que te pongas detrás de mi, esto parecerá una gran lucha- Le decía a Sky que parecía asustado, bueno al menos en mi parecer, era esperarse tras ver ese monstruo

Al escuchar esto, retrosedi inmediatamente, sin pensar en nada mas, estaba aterrado, no podia creer que algo asi fuera posible, que estaba pasando, no entenia mucho, solo veia a estos dos gigantes luchando, uno para protegerme y ptro para matarme, no se que hubiera hecho si hubiera estado solo, por suerte me encontraba con mi maestro en ese momento, si no, yo ya estaria muerto desde el prinsipio.

pasmado, me quede mirando como la pelea, no sabia cuanto podira durar esto asi, "en cualquier momento uno caera" pensaba yo, deseando que fuera el gigante negro, pero no sabia quien perderia y quien saldria victorioso.....

Comenzó la batalla entre los dos gigantes, los dos estaban dándose golpes en varios sitios en el cuerpo , lastimándose uno con otro y yo solo podía mirar como entre ellos, tan solo uno, era el mas fuerte. De pronto, el negro, había dejado de hacer golpes y de repente hablo –Exorcista- Decía con fuerza –Exorcista- cada vez con mas fuerza –Exorcista- uno y otra vez.

Yo no comprendía lo que hacia y por que repetía muchas veces esa palabra, así que sencillamente no le di importancia pero tenia el presentimiento que algo hacia. Tenia razón, escuche un ruido desde atrás y voltee para ver a varias bolas de metal que estaban detrás de nosotros.

que...... no puede ser.... todos esos..... son demasiados.... y aparte este gigante......- puse denuevo la mano sobre mi reloj [tengo que ayudarlo, no puedo dejarlo solo en este momento, porfavor, activate, activate]
esta vez, un resplandor salio de mi reloj, como la vez anterior cuando no estaba mi maestro, se activo correctamente, no podia creerlo, ahora podria ayudar a mi maestro, solo espero poder ayudar y no ser una carga para el

El muñeco seguía golpeando con más fuerza haciendo que se caiga una de esos golpes el gigante negro al piso pero el no dejaba de golpearlo como sea, con las piernas, con las manos o con la misma pierna pero no dejaba de hacerlo. En uno de esos golpes, pareció ser mortal por lo que el akuma dejo de moverse y dejar de decir “exorcista” a cada rato. Pero lo que me preocupaba era que había unos tres o cuadro Demonios ovalados detrás de mí así, pensé primero en que debía ocuparme de ellos rápidamente pero vi claramente que mi hijo ya no tenia problemas con su inocencia así que automáticamente grite: -HIJOO!!!! ENCARGATE DE ELLOS-