Kioto, Japón.

Atendía claramente a la chica, cada palabra, sin perderse alguna parte, hasta que ella terminó, al fin había comprendido el porqué de la cosas, su viaje que creía sin sentido, había llegado a su fin su primera parte, pero, ¿comenzaría al segunda?, seguir avanzando sería una perdida de tiempo, y regresar a su casa ya no tendría sentido, no pudo subir su mirada hacia el lugar de donde provino, su hogar, estaba preocupado por sus padres, los cuales, quizá no se darían cuenta de su ida, no había opción alguna en la cual pensar, si no dar una afirmativa, a cambio encontraría combatientes fuertes, y a la vez salvaría almas, un fuerte trabajo, pero cualquier error valdría por muerte, no lo pensó dos veces y dió su respuesta definitiva, sonriendo claramente.

-¡Ja! ¿Qué clase de pregunta es esa?... claro que me les uno-respondió con determinación.

Un pequeño gato oscuro, paso desapercicbido entre la multitud de japon, agil y elegante camino rápidamente pasando junto al lado de los exorcistas.

-¡Ja! ¿Qué clase de pregunta es esa?... claro que me les uno-respondió con determinación.

Pudo escuchar el gato y siguió su camino, pasando de ellos, metiéndose por un callejon. Muy pronto la forma de aquel pequeño gato se volvió grande tomando una figura femenina.

-Señorita Lulubell.- un akuma de nivel dos, quien tenía la forma de una calabza por cabeza, se encontraba allí. Haciendo una inclinacion hacia su ama.

-...el novato.- dijo ella, refiriéndose a Ichigo.- Diles que roben su inocencia, ya sabes que hacer, entretengan a esa chica.- Tal como dijo el nivel dos no hizo esperar a la Noah. Dio un salto hacia el techo mas cercano.

-¡¡¡Exorcistas!!!- grito el akuma de nivel dos.- Es su fin y de todos ustedes igual.- grito el akuma dando su localizacion enseguida. Segundos después el cielo se ve invadido por miles de bolas de metal con cañones saliendo de sus cuerpos, akumas de nivel uno.- acabenlos.- solto este. Mientras la mujer miraba desde otro punto la batalla que iba a comenzar

La gente mira horrorizada la prescencia de esas cosas, y estos no demoran en atacar a las personas una tras otra y a los exorcistas, tras la orden del akuma de nivel dos. Dos grupos de akuma de nivel uno se dirigieron hacia Katherine y Ichigo, disparando sin detenerse.

(off: la tarea es facil, salvar a toda la gente que puedan y protegerse ustedes mismos)

-¡Genial! ¿Tú nombre, que no me dijiste es? -Katherine sonrió emocionada ante la afirmativa del chico, ¡Lo había logrado! Y eso que en un comienzo le había parecido tan difícil, pero ahora ya no puesto que él había aceptado unírseles, sólo tendría que darle más detalles sobre el Conde, la orden, la familia Noah...

-¡¡¡Exorcistas!!!- grito el akuma de nivel dos.- Es su fin y de todos ustedes igual.-

Palideció mientras elevaba la mirada hacia el techo de donde provenía el grito; un Akuma de nivel dos... genial, esto sí sería algo difícil. Mordió su labio inferior y cuando el cielo se vio lleno de Akumas, se dio cuenta del gran peligro que no solo corría el pelirrojo, sino, todos los aldeanos los cuales gritaban asustados por la presencia de los monstruos.

-¡CHICO! -Gritó llamándole así al no saber aún su nombre- ¡¿No manejas bien tu inocencia, verdad?! -Preguntó algo frustrada, se encontraba al parecer sola- ¡Intenta activarla como sea! -Señaló al de nivel dos- ¡Es el más peligroso, intentaré pelear contra él pero por favor, intenta despertar tu inocencia para poder salvar a los aldeanos! -Fue lo último que le dijo, ya no quedaba tiempo; comenzaron a atacar.

-¡INOCENCIA! ¡ROSE SILK, ACTÍVATE! -Invocó el nombre de su inocencia, sus guantes de seda color rosa brillaron y comenzaron a deshilarse a partir de sus anillos, quedando en finos hilos- ¡Ataquen al Akuma! -Los hilos que en segundos anteriores ondeaban con la brisa; se dirigieron velozmente hacia el Akuma para atacarle- Tsk... se me fue -Maldijo al ver que el Akuma había desaparecido. Fue en eso que escuchó el grito de las personas- Maldición, esto no puede estar pasando -Elevó ambos brazos al cielo- ¡ESCUDO! -Cada hilo de acero de sus guantes creció enormemente y se elevó un escudo alrededor de la ciudad; impidiendo que las balas de los Akumas atacaran a las personas, pero dejando a Katherine desprotegida- Joder... podré mantener la barrera, pero el Akuma nivel dos está dentro -Dijo molesta- De todas maneras... no comprendo que hace una gran concentración de Akumas aquí sólo para atacar a dos chicos... a no ser que... -Su rostro palideció aún más- La familia Noah...

-Ichi...-fue lo que llegó a decir antes de que una voz extraña interrumpiera su conversación tranquila,"¡Exorcistas!, es su fin y de todos ustedes igual" oyó claramente, algo no iba bien, presintió el joven, una gran sombra empezó a crecer en el suelo, algo que no era muy normal,quizá una nube,cualquiera pensaría, alzó la cabeza y para su sorpresa miles de monstruos en forma de bolas de metal, idéntica a las que había derrotado aquella vez, se acercaron al pueblo, personas que estaban admirando la escena, se sorprendieron por igual y del susto empezaron a gritar y a correr a su casas pensando que estarían seguros, su nueva compañera de viaje enfrentaría a aquella bestia sola, era el más fuerte y no podía hacer nada con su guante, al ver que no encontraba forma alguna de activarla, para ella que tenía práctica sería fácil, pero para un inexperto como él, no. Miró su guante, y volvió puño su mano el cual le tenía, algo tenía que hacer, pero quizá ubiera alguna forma, subió la cabeza y miró claramente como ella activó su arma diciendo específicamente "¡Inocencia,Rose Silk, actívate!" su arma empezó a actuar y unos filosos hilos salieron para atacar a aquel Akuma, pero este había desaparecido, nuevamente miró su guante, quizá de la misma forma activaría su arma especificando nombre, el cual no sabía he inventaría, apretó más fuerte el puño en deseo de que funcionara.

-¡Inocencia, guante explosi...!

Llegó a decir si quiera, una presencia oscura y pesada pudo sentir a sus espaldas, algo que le atacaría o quizá mataría.

(Cómo no puedo decir si me ataca de tal forma o no se como tengan el modo de juego (el cual necesito adaptarme) dejaré a la admin que manipule si me golpea o algo, pero lógicamente que no me mate ¬¬)

(off: podrias haber salvado tu solo pero ya quem te matare muahahahaha xD)

Una sonrisa se forjo en la cara del nivel dos, fue hacia donde estaba el novato y lo empujo contra un muro, haciendo gran estruendo para luego reír desquiciadamente.

-jajajajaja!!!!- decía este- vamos chico dame esa inocencia nisiquiera puedes usarla bien.- exclamo este sin darle oportunidad para atacar.

Mientras un cumulo de akumas de nivel uno rodeaba a la chica exorcista, atacandola de distintos puntos. Otros akumas empezaron a atacar a los lugareños.

-Maten al exorcista.- una voz femenina se hizo presente. Y los akumas de nivel uno que quedaban se dirigieron hacia el chico apuntando sus cañones y dispararon. El akuma de nivel dos veía toda la escena con gracia

(off: recuerden solo guiarse por el orden de posteo de los exorcistas asi que si no posteo no me esperen xD)

Katherine intentaba resisitir, pero los ataques de los Akumas al ser un gran número hacían que el escudo se debilitase a cada momento más... y una gran cantidad de ellos dejaron de atacarle para atacar a los aldeanos. "¡No!" Pensó, pero si detenía ahora el escudo, los Akumas se lanzarían contra ella, algo tenía que hacer...

-jajajajaja!!!!- decía este- vamos chico dame esa inocencia nisiquiera puedes usarla bien.-Escuchó la voz del Akuma... tampoco podía dejar al chico solo después de aquel ataque que le habían dado, adempas de que aún no podía activar su inocencia. "Maldición... es elegir entre los aldeanos, el chico y yo... no puedo dejar que ninguno muera..."
-Maten al exorcista.-La nueva voz le hizo reaccionar y volteó rápidamente; era un familiar de la familia Noah. Sin pensarlo, deshizo su escudo, corrió esquivando las balas de los Akuma mientras gritaba un No muy fuerte y se lanzó hacia el pelirrojo; no podía dejar de que un exorcista falleciera. Dirigió su inocencia hacia los Akumas de nivel 1 que atacaban al chico y comenzó a destruirlos.
-¡ACTÍVALA YA! -Gritó mientras con miedo veía al Akuma de nivel 2, aquella mujer Noah y el pueblo en llamas; se sentía tan impotente que contenía las lágrimas mientras la furia y adrenalina recorría sus venas- ¡AQUÍ HAY UN FAMILIAR NOAH, ES MUCHO MÁS PELIGROSO QUE TODOS ESTOS AKUMAS JUNTOS!

{Oke Lilium xD}

Sin más poder evitar un fuerte empujón que lo envió contra un muro, este intentó voltearse y poner su espalda para disminuir el golpe, peor de nada valió, el golpe hizo que el muro se le hicieran varias grietas y su espalda golpes enormes, demás del estruendo causado del choque de estas, Ichigo estaba semi inconciente debido al fuerte golpe, pero todavía podía levantarse, estaba medio descansando en el muro, derrempente algo lo activó como una fuerza que lo hacía seguir, lo despertó, levantó la cabeza mirando claramente como la chica le protegía de limitados choques y Akumas, ella le protegía y no podía hacer nada para ayudarle, intentó levantarse lentamente, sus piernas le temblaban y tardó mas o menos 5 segundos en levantarse, pensando en lo que creía importante para el en esos momentos, que eso era lo que le mantenía despierto.

(Me fui de mi casa por conseguir respuestas, avandoné a mis padres por esa misma razón, avandone mis estudios, deje todo atras por una única razón...)

Al poder levantarse este tenía una mirada perdida, se puso derecho y miró su guante de nuevo.

(Saber que era de verdad esta cosa, y escondidamente que era yo, ahora lo sé, y sé lo que hare... venceré a todos los contrincantes que tenga...)

Hizo puño su mano derecha.

(Y regresaré a las almas a donde pertenece... y ayudaré a mis compañeros en la lucha)

El guante el cual desde estos dos días estaba actuando normal, emitía una luz verde en la zona de la cruz, esa era la señal para poder activarla

-¡Inocencia, guante explosivo, actívate!

Una luz roja debajo del guante se pudo ver durante unos 2 segundos, luego de ello desapareció, al fin pudo activar su Inocencia pero, ¿por cuánto tiempo?, eso era lo de menos, el objetivo ahora era salvar a los ciudadanos a nosotros mismos, Ichigo se sentía mejor que nunca listo para la lucha, al ver hacia la chica un Akuma nivel 1 se le acerco por la espalda hacia ella y cargaba uno de sus cañones, él sonrió y salto hacia aquella abominación y le golpeo con su mano derecha, causando una fuerte explosión, Ichigo había logrado derrotado vencerlo y luego estubo de espalda hacia la chica para cubrirle la espalda.

-Elimina las cosas flotantes que estan en el cielo, yo me encargo de la cosa que me empujó, con tus guantes puedes alcanzarlos, yo solo puedo atacar directamente, por má que salte no les alcanzo... ¿puedes?

Sintió un gran estruendo provenir de su costado y con sólo el rabillo del ojo, miró como al fin el chico había activado al fin su inocencia y destruía un Akuma muy cercano a ella, que al parecer estaba apunto de atacarla.

-¡Gracias! -Le dijo lo suficientemente alto cuando sintió que se situó detrás suyo.
-Elimina las cosas flotantes que estan en el cielo, yo me encargo de la cosa que me empujó, con tus guantes puedes alcanzarlos, yo solo puedo atacar directamente, por má que salte no les alcanzo... ¿puedes?
-¡Claro que puedo; pero es mucho para ti! ¡Es un nivel dos, no podrás contra él! -Katherine intentó disuadir al chico, pero cuando se volteó observó la determinación de sus ojos... por más palabras y explicaciones que le diese, no se retractaría de su decisión. Volteó nuevamente y encaró a los Akumas de nivel uno- Apenas me encargue de ellos te apoyaré, pero avísame si es demasiado peligroso para ti, no sigas si no puedes más ¿Vale? Promételo -Miró entre todo el caos y susurró para sí misma- Dónde estás Noah... tsk.

Ichigo se sentía casi invencible ante sentir que su Inocencia se había activado, no dejaría que nadie se interpusiera, así fuera morir en el intento "Apenas me encargue de ellos te apoyaré, pero avísame si es demasiado peligroso para ti, no sigas si no puedes más ¿vale? prométemelo" escuchó decir a la chica, bajó la cabeza y sonreía.

-No puedo prometértelo, simplemente porque quiero pelear con algo más fuerte, no importa lo que fuera, se supone que los exorcista...lo que somos, nos arriesgamos nuestra vida en luchar contra estas cosas ¿no? tranquila, no moriré, y si así fuera, cumplí mi deber como tal, tu encárgate de lo tuyo y yo de lo mio...¿bien?

-Vaya... -Katherine se sintió asombrada por las palabras del pelirrojo y sintió admiración hacia él, sonrió; era un novato pero confiaría en él, lo lograría- Ok, es todo tuyo ese Akuma, yo me encargaré de proteger a los aldeanos y de los de nivel uno -Rió- Pero por favor, intenta que no te mate -Lo dijo seria, denotando nuevamente su preocupación- ¡Cuídate! -.

Se arrodilló un poco y dio un gran salto esquivando los ataques que los Akumas le enviaban y dirigía todos los hilos de acero a atacarles; destruyendo varios, pero al parecer aparecían más cada vez que mataba alguno. Siguió buscando frenéticamente con la mirada la ubicación del oculto Noah, mientras que de cuando en cuando volteaba a vigilar al pelirrojo; confiaba en él, pero su inocencia aún no era manejable del todo y podría ocasionarle problemas.

-¡Noah! -Gritó mientras aterrizaba en la tierra y saltaba rápidamente mientras que en el lugar donde hacía pocos segundos había estado, impactaron varias balas de Akuma- ¡Muéstrate! -En eso, por su mente se pasaron varias incógnitas... ¿Por qué llamaba con tanto frenesí al Noah sabiendo que no se encontraba en capacidad para hacerle un razguño siquiera? ¿Cuándo se había vuelto tan estúpida para dejar de pensar y comenzar a seguir aquellos impulsos casi suicidas? ¿Cómo había terminado ahí, protegiendo a un chico del cual no conocía su nombre y a miles de personas con las cuales no había tenido tacto alguno? ¿Por qué hacía todo esto...?- Porque soy una exorcista -Se susurró a sí misma para convencerse y recordó las palabras del pelirrojo "Lo que somos, nos arriesgamos nuestra vida en luchar contra estas cosas ¿no? tranquila, no moriré, y si así fuera, cumplí mi deber como tal". Sonrió, había encontrado la fuerza que necesitaba para pelear por más negra que se tornase la situación.

Ichigo había logrado convencer a la chica para que le dejara pelear, ahora nadie se interpondría en su pelea.

-Gracias...

Le dijo bajo antes de que se fuera, al subir la cabeza el Akuma se encontraba sentado encima de la cabeza de la estatua.

¿Al fin estas listo?

Decía con una gran risa malvada de oreja a oreja, un segundo después este desapareció, Ichigo no lo pudo detectar con su vista, intentó buscarlo con su vista, mirando hacia la derecha ,izquierda, arriba, abajo, así que solo quedaba un lugar, atrás, pero algo lo tenía paralizado para no ver, un sonido con la boca se escuchó del Akuma un tick, tick, hacía este, en señal de lo equivocado que estaba.

Último error que tendrás...

Él intentó voltear y golpearle, pero el Akuma fue más rápido y le golpeo en una costilla, seguido de otro fuerte golpe en la misma zona pero este le enviaría a elevarse, lo envió hacia la parte de atrás de la estatua saltando encima de ella, justo caía de cabeza y si pie apenas pudo tocar la parte de la cabeza.

¡Muere!

Un rayo fino y rojo salio de sus manos en horizontal cortando la cabeza de la estatua y la punta de su zapato, por suerte, peor eso no evitaría su golpe de cabeza contra el agua y el piso que estaba debajo, sin pensarlo dos veces elevó su mano derecha para caer sobre ella, pero una táctica era al caer sobre ella la Inocencia se activaría y la explosión aunque fuera corta le disminuiría el golpe, y eso paso al caer sobre ella dio la explosión, la presión que ejercía ella hizo que se estabilizara u cayera de pie en una voltereta, el agua salpicó hacia fuera dejando solo el suelo liso y parte de la estatua intacta de la explosión, este se levanto y se escondió detrás de la estatua para idear alguna forma de derrotarlo sin tener más heridas, y una posibilidad de morir en el intento, la cabeza de la estatua cayo a su lado rompiéndose en tres partes, justo cuando lo vio tenía la estrategia perfecta para vencerlo, mientras el Akuma caminaba lentamente hacia su posición.

morirás en cuestión de nada

-"con que la exorcista me esta buscando"- pensaba la noah mientras veía desde un lugar seguro.- "Lastima que no sea mi objetivo... pero..."

La noah le dio ordenes a los niveles uno y de repente estos dejaron de atacar a los pocos pobladores que seguían con vida para atacar a la chica exorcista y al novato.- quitenle la inocencia.- ordeno refiriéndose a Ichigo.

-Como ordene señorita Lulubell...- dijo el akuma de nivel dos. Los akuma de nivel uno fueron, apuntaron y dispararon sus callones contra ambos chicos. Los disparos venía de varias direcciones, aprovechando que estaban sin proteccion del uno y del otro, ya que estaban luchando individualmente.

Varios Akumas de nivel uno volvieron a aparecer para su fastidio; pero por suerte estos al comenzar a atacarle dejaron en paz a los pobladores, lo cual le alivió un poco. "Parece que se está escudando detrás de ellos y no saldrá..." Pensó mientras esquivaba los ataques; se encontraba algo cansada y le era mucho más fácil concentrar las energías que tenía en escapar que en atacar, así "descansaba" y podría luego seguir atacando más tarde. "Siendo un Noah, debería pelear conmigo al ser la exorcista experimentada aquí... pero no lo hace..." Realizó una maniobra poniéndose entre el ataque de dos Akumas para luego escapar y que estos se matasen el uno al otro, lográndolo. "Pero si no se aparece a pelear frente a mí es porque no soy su objetivo..." Miró al pelirrojo, el cual peleaba contra el Akuma de nivel dos. "... Debe ser el chico el objetivo... claro... su inocencia aún es inestable y no puede manejarla del todo..." Se mordió el labio inferior. "Aún así le dejé que pelease sólo y ya no puedo retractarme... sólo me queda tener fe en él" Justo en eso una bala de Akuma casi rozó su mejilla, pero por la fuerza con la que fue lanzada, el viento le hizo un corte horizontal y la sangre fluyó delicadamente por su piel.

-Es hora de volver a pelear -Dijo seria y su inocencia que había vuelto a ser sus guantes de seda, volvió a deshilarse mientras los anillos brillaban- Tengo que acabar rápido con ustedes para ayudar al pelirrojo, así que apúrense -Les miró con cólera, saltó, y comenzó nuevamente a pelear contra ellos.

(Veamos se supone que mi Inocencia se activa al tocar algo, la cual al volverse completamente rojo esta explota dejando el mismo peso de la cual explota en presión, mientras mas grande sea el objeto más grande es la explosión, pero me he dado cuenta de que puedo hacer explotar las cosas cuando chocan con algo, cuando toqué el suelo esta tubo que ser contacto con suelo, al estar un roca sostenida en el aire y choca contra algo esta se descomprime y explota, quizá pueda hacer tocar alguna de esas rocas con mi guante y explotársela en la cara, eso no bastará pero podré hacercarme más libremente hacia el para acabarle...)

Ichigo se encontraba con su cuerpo con mucho sucio, sus ropas estaban casi quemadas y sus músculos se cansaban rápido debido a las explosiones seguidas, por su fuerza de voluntad era lo que le mantenía en pie y se mantenía, estaba descansando apoyándose en al parte trasera de la estatua esperando a que se acercara y luego lanzarle las piedras y golpearle de una vez por todas.

-Ahora o nunca

Este agarró una de las piedras y la agarró con su mano derecha en al cual tenía el guante, en cuanto se dió a aparecer el Akuma ya no estaba caminando hacia él, había desaparecido, se sorprendió por su velocidad y este miro a los lados en cuanto no lo pudo ver sabía que estaba atras, volteo rápidamente y lo tenía justo enfrente, el Akuma seguía teniendo la cara diabólica, la sonrisa de oreja a oreja.

Por lo menos fuiste más rápido que antes...¡jaja!

Este lanza un golpe contra su pecho y lo envía varios metros hacia atrás, al golpear el suelo este se rompe a su paso, por tal velocidad, una montaña de escombros se hace a sus espaldas al detenerse, este intenta pararse, lo cual le cuesta, se logra sentar, el Akuma se acerca lentametne hacia él, al llegar le agarra la cabeza y le sujeta, lo eleva por lo que sus pies no llegan al suelo.

¡Adios!

-Eso es lo que tu... crees...

Mostraba una sonrisa.