Misión a Grecia [Aizar & Sigma]

Johnny escribió:En un pequeño pueblo del país griego, todas las noches se ha empezado a escuchar una dulce y larga melodía. Lo extraño de ésta es que se presume que es la causante del repentino cambio de personalidad de los pobladores. Durante su entonación, todos los pobladores yacen dormidos, e incluso ha llegado a afectar a los buscadores. Nos dimos cuenta de esto cuando uno de ellos llamó para reportar el caso y de fondo se escuchaban las voces de otros dos al parecer uno alterado, y otro entrado en cólera. Hasta donde han logrado averiguar, la procedencia de la melodía proviene de uno de los templos sagrados en honor al dios Febo o Apolo que queda en los límites de la misma.

De los buscadores hasta ahora, nada se sabe. Es el deber de ustedes dos averiguar qué sucede y por qué.

Estaba nerviosa, no porque la misión pareciera difícil ni mucho menos el hecho de que mi dulce hermana me acompañara en dicho viaje, lo que realmente me alteraba es que iría a ver a mi maestro

-y yo sin flores - estaba sentimental y no sabía cómo afectaría eso a la misión, tome una botella de mi mochila y mire por la ventana, el tren avanzaba y los árboles parecían desaparecer corriendo atreves de la ventana , apreté el puño

"no hagas eso un día de estos vas a lastimarte” dicen bien que después de ver morir o matar.... la vida ya no es la misma y yo no era la excepción, amaba recordar a mi maestro pero cada vez que lo escuchaba el miedo era mi única respuesta

“todavía huele a muerte”ese aroma nunca se iría de mi a pesar de lo que hiciera…

Había logrado que uno de los encargados del tren me consiguiera un cuchillo para poder pelar y cortar mi manzana mientras permanecíamos en nuestra cabina de tren, Gogu se había quedado dormida entre mi hermana y yo

"Esta sabrosa..." pensé al comer un pedazo de la susodicha fruta, después corte otro trozo y volteé a ver a mi hermana

-Lo quieres?- le dije extendiéndole el cuchillo con el pedazo, pero me encontré con que ella miraba por la ventana con una dejo de tristeza y melancolía

-y yo sin flores- le oí decir, caí en la cuenta de que seguramente se encontraba recordando a su querido Maestro

-Compraremos unas, las más bellas...- hablé y luego comí la manzana que antes le había ofrecido, corté otro pedazo -por eso tenemos que terminar con éxito esta misión, de esa forma podrás llevarle excelentes noticias- concluí con una leve sonrisa y nuevamente le ofrecí un trozo de manzana

Las palabras de mi hermana me devolvieron de golpe a la realidad, la mire con detalle y antes de decir algo suspire fuertemente

“necesitas continuar porque eso es lo correcto”sonreí entonces al escuchar esas palabras

-gracias- le dije a mi hermana tome el cuchillo y empecé a trabajar con mi manzana, acaricie suavemente a la Gogu y por un momento la observe dormir

-no falta mucho para que lleguemos- los sabia por el cálido aroma de la costa y sobre todo por el paisaje "seco" del mediterraneo...

"Yo le estaba ofreciendo un pedazo y me ha quitado el cuchillo" pensé haciendo una cara de resignación para después comenzar a morder mi fruta

-no falta mucho para que lleguemos- comentó, luego acaricio a Gogu quien despertó y comenzó a tallar sus ojos

-Qué bien!- exclamó y se asomó por la ventana -esta muy soleado... debió haber traído un sombrero Maestra- dijo volteando a verme

"Nee..." pensé y terminé con mi manzana

Una vez el tren se detuvo tomé mi equipaje, Gogu trepo a mi hombro y levantándome del asiento dije con serenidad

-Supongo que algún buscador nos estará esperando, ojalá no sea el agresivo...- concluí mirando a mi hermana

-¿el agresivo?- continué mientras me levantaba y alistando mis cosas para salir me recargué suavemente en ella, hacia tanto tiempo que no la tenía cerca que me invadía fuertemente la nostalgia

-soy un asco- murmuré mientras caminábamos en dirección a la salida del tren mezcladas entre la multitud

-¡exorcistas!- gritó un joven rubio aproximándose ansioso para recibirnos

-hola - sabia de ante mano que era un buscador y con una sonrisa tranquila me dispuse a presentarme

-soy Oswald y es mi primera misión con la orden- insistió sin permitirme hablar

- mucho gusto ella es Sigma-sama, Gogu y yo Aizar Driarte- dije conteniéndome una risotada pues la actitud extraña del muchacho me resultaba graciosa

-los ayudaré con lo que pueda- concluyó reverenciandonos…

Pude sentir como mi hermana se había recargado suavemente en mí y le oí exclamar algo, deje salir un suspiro y volteé a verle sonriendo levemente y luego le tomé de la mano

-Estoy llena de energía!- gritó de pronto Gogu y alzó su puño al cielo

"No hay remedio..."

Una vez descendimos del tren y que el buscador se presentase incliné mi cabeza en signo de agradecimiento "Se nota nervioso..." pensé al verle sonreír respecto a mi gesto

-Hay que dar nuestro mayor esfuerzo Oswald!- exclamó mi tortuga

-S-Si!- contestó el chico con algo de timidez -por favor síganme he conseguido un carruaje que nos llevará hasta el pueblo en cuestión- agregó un poco más confiando mientras señalaba el camino que seguiríamos después comenzó a caminar esperando que le siguiésemos

Cuando estuvimos dentro del transporte Oswaldo habló

-Sé que la Orden les habló de la melodía misteriosa y de lo que ocasiona, hemos estado averiguando de dónde es que proviene... según nosotros es del templo cercano dedicado al Dios Apolo, hemos ido varias veces por la mañana pero nunca encontramos algo sospechoso... lo malo es que cuando es de madrugada no podemos hacer mucho, uno de mis compañeros sugirió que usáramos tapones de tela para poder llegar ahí ya entrada la noche, al principio funcionó pero cuanto más nos acercábamos al origen el volumen aumentaba y con ello los estragos en nuestra personalidad...- concluyó el buscador evitando nuestras miradas y un leve sonrojo se mostró en su rostro

"De verdad será él el agresivo?" me dije percatándome de aquella actitud

-¿y donde están tus compañero?- mi voz se torno firme, era un tanto sospechoso que no estuvieran juntos

-Armand se puso realmente mal…no pudo soportarlo y aunque la música no se escuche, él se ha vuelto muy histérico por eso Nick se ha quedado a cuidarlo- dijó con la mirada baja y el rostro entristecido, tomé entonces una botella de mi mochila y se la ofrecí

-no te preocupes todo saldrá bien- continué, el buscador tomo delicadamente la botella y esbozo una leve sonrisa, mire entonces a mi hermana

-debemos hallar una forma de acercarnos sin que nos afecte- reflexioné esperando alguna idea brillante por parte de Sigma

-estamos cerca- interrumpió el buscador mirando por la ventanilla del carruaje…

[Off: Uno supondría que ya iríamos más adelantadas... Lo siento hermana T-T]

"Hay algo que me gustaría saber..." pensé al escuchar las palabras de mi hermana sin embargo mi reflexión se vio interrumpida por las palabras de Oswald avisando nuestra cercanía al pueblo

Finalmente habíamos llegado al lugar indicado y una vez descendimos del carruaje el buscador nos llevó hasta una posada, donde al parecer se habían estado quedando

-Esta será su habitación- comentó abriendo la puerta de aquel cuarto, que contenía en su interior dos camas

-Quiero ver a tu compañero- comenté mientras dejaba mi equipaje sobre una de las camas, Gogu saltó a la susodicha y comenzó a saltar

-Eh? Pero Exorcista-sama él esta...-

-Aunque este algo "chifladito" nosotros no discriminamos a nadie- interrumpió mi peluche con aires comprensivos y una seriedad fingida, lo que ocasionó que al buscador le surgiese una gota de sudor en la frente

"Donde aprendió lo de "chifladito"?" me cuestioné mirando a Gogu, luego miré a mi hermana con una ceja arqueada, no es que sospechara de ella sino más bien de que no entendía las incoherencias de mi tortuga y necesitaba apoyo

-Estoy consciente de eso, te pido que me lleves con él hay una duda que necesito resolver- dije volviendo a mi estado sereno

-C-Claro...- dijo por fin Oswald e hizo una seña para que le siguiésemos, Gogu trepó a mi hombro y me dispuse a salir de la habitación esperando que mi hermana hiciera lo mismo

- y eso que no “discriminamos”- dije mirando de reojo al pequeño peluche que junto con el buscador y su Maestra se dirigían a ver al sujeto que tenía “problemas con su actitud”, me limite a seguirlos ya que conocía bastante bien a mi hermana como para dudar, justo cuando llegamos a la habitación nos topamos con otro buscador

-Hola exorcistas…mi nombre es Nick y no creo que sea muy buena idea que entren-nos intercepto mientras miraba al suelo acongojado

-mi compañero está muy inestable- continuo temeroso

-no hay problema sabemos que sucede- le conteste mientras lo quitaba del paso he ingresando a la habitación me tope con una escena un tanto escalofriante: el sujeto estaba atado a una columna y amordazado para que no se mordiera la legua supuse yo. Ingrese con paso suave en un intento por mantenerlo tranquilo pero mis esfuerzos fueron frustrados cuando al verme empezó a retorcerse golpeándose su cabeza contra la columna, rápidamente me acerque y con mi mano sostuve su cabeza para que no siguiera lastimándose

- lo que necesites ver hazlo rápido no creo que tengamos mucho tiempo- estando en cuclillas mire a mi hermana... deseaba una respuesta rápida…

"Vaya situación..." me dije al ver aquella escena, había supuesto que el sujeto estaría algo inestable pero no de ese modo

-lo que necesites ver hazlo rápido no creo que tengamos mucho tiempo-

-Bien- dije simplemente y me acerqué al sujeto para quitarle la mordaza

-POR QUÉ NO SE VAN A COMER UNA PIEDRA Y DE PASO SE ROMPEN LA BOCA?!?!?!- gritó iracundo el buscador frente a nuestros rostros, pude ver con claridad su garganta

-Que grosero...- murmuró mi tortuga

-Qué es lo que estas escuchando ahora?- pregunté sin inmutarme ante tales gritos

-Y A TI QUÉ TE IMPORTA!- gritó una vez más

-Es una flauta?-

-MALDITA SEA NO!- volvió a exclamar

-Entonces qué es? No será que eres un ignorante y realmente no sabes lo qué es? Vaya idiotez- dije en tono arrogante pero mi rostro seguía inmutable

-MALDITA ENGREIDA! ES OBVIO QUE ES UN ARPA!- volvió a gritar

-Ja- exclamé mientras le cubría nuevamente la boca y me disponía a salir de aquella habitación

"Hora de trabajar..."

Tras un hábil juego de inteligencia por parte de mi “pequeña” hermana nos dirigimos fuera de la habitación, habiendo descubierto el instrumento que causaba el radical cambio de personalidad me dispuse a buscar algo que pudiera amortiguar el impacto de la música sobre nuestros pulcros oídos

-lamento insistir con esto pero que usaremos para evitar la catástrofe en nuestro organismo- esta vez me rascaba la cabeza con exaltación pues por más que intentaba pensar en algo que pudiera minimizar el sonido no se me ocurría realmente nada

-usamos tapones pero no funcionaron- insistió el buscador que escuchaba nuestra conversación, al mirarlo tuve una idea

-hay que usar nuevamente los tapones pero ahora les pido que también usemos orejeras- dije en mi desplante de iluminación mientras miraba triunfante a mi hermana, sabía que si combinábamos los dos objetos de seguro evitaríamos daño considerables en nuestras personalidades, los buscadores entusiasmados se dirigieron en busca de los objetos que había pedido …

Sonreí levemente al escuchar la idea de mi hermana, era justo lo que necesitábamos y justo entonces otra cuestión salto a mi cabeza, había deducido que el buscador afectado aún tenía presente la música y por lo tanto sus consecuencias seguían, pero por que sólo él?

"Cuantas veces se habrán acercado al templo?" me cuestioné de pronto, luego miré a Aizar

-Vayamos a entrevistar a la gente- sugerí con tranquilidad y comencé a caminar por el pasillo rumbo a la calle, me encontraba de cierto modo intranquila por la situación y mi cabeza estaba llena de preguntas incluyendo el hecho del por qué tampoco había akumas...

"Que ironía siento que extraño a los globos" pensé dirigiéndome a un sujeto de aspecto escuálido que pasaba por ahí

Salimos para investigar al parecer debíamos hablar con la gente para resolver el misterio, mientras caminábamos en las calles había cierta calma ”aparente” de seguro el Conde habría enviado algo para hacer nuestra misión aun mas difícil, note que mi hermana cambiaba de rumbo y se dirigía a un sujeto delgado que se encontraba recargado en una pared

-hola…¿sabes algo de la misteriosa música?-me adelante a preguntar estaba algo ansiosa, el calor solía provocar eso en mi

-EXOR-CIS-TAS- balbució mientras su cuerpo empezaba una transformación

-ok creo que es la hora de jugar- continúe y activando la inocencia de mis manos me dispuse a empalarlo, no paso mucho tiempo para que un gran grupo de Akumas Nivel 1 nos rodearan con malas intenciones

-mírame- murmuré dando algunos giros esquivando los disparos de las maquinas…

"Rayos" pensé al ver que en cierto modo yo había llamado a las esferas "porque podría volverse realidad..."

Me dirgí con rapidez hacia los akuma que surgían de los alrededores, destruyendo con ello los edificios y las calles, pude ver como la gente común corría desesperada lejos de aquel lugar

-Dinastía verde- pronuncié dando un salto hacia los enemigos, estos explotaron dejando una estela de humo venenoso -Tsk!- exclamé cubriendo mi rostro con mi brazo, volví la mirada hacía el hotel y me percaté de que los buscadores salían de ahí junto con la gente del lugar

-Evacuen la zona- grité con fuerza para que me escuchasen, uno de ellos asintió con la cabeza y se dispuso a cumplir con aquello, reojo vi a mi hermana destruyendo a otros globos

"Bien" pensé al ver a otros akuma acercándose, nuevamente corrí hacía ellos evitando sus disparos y estando cerca volvía atacarles con mi inocencia, lo que ocasionaba su destrucción

-Aizar, trata de no alejarte de esta zona así será más fácil que los buscadores alejen a los pobladores- hablé con fuerza mientras pasaba cerca de mi hermana, luego tomé impulso de una pared y de otro salto llegué a otro akuma para atacarlo

Las explosiones continuaban...