Ataque a Sidney

Estaba paseando por las bonitas calles de Sidney. Me aburria tanto en el Arca que decidí salir a dar un "paseo" y a practicar los atques con Akumas.
Llegaba al Palacio de la Ópera de Sidney, era inmenso e impresionante. También era buen lugar para matar gente... podria ser divertido.
Cuanta gente hay aquí... y de momento no parece que haya ningun exorcista cerca... *somriendo maléficamente* a ver cuanto tardan en llegar!!

- A jugar!!! - grité en medio de la calle, la gente se giró, me miró y empezaron a gritar!!
Tres Akumas nivel 1 aparecieron detrás mio.

- A ver si subís de nivell antes de que lleguen los exorcistas!! Jua jua jua

El barco que habiamos ya iba llegando Sidney, a lo lejos podiamos ver algunos vestigios de de aquella ciudad. Los buscadores, que antes nos había acompañado, ahora estaban vigilando el barco, no se sabía si los akumas podían atacarnos mientras llegaramos.
Lo primero que quería era llegar y acabar con los akumas, no me gustaba ser exorcista, pero tampoco me gustaba pensar que de seguro había gente sufriendo por los akumas; debía ayudar.
-cuanto faltara para llegar Allen?- le llame yo poniendo mi mejor sonrisa, eivtando viera mi preocupación.
-Segun el capitan llegaremos en media hora mas.- un buscador apareció y respondía la duda de Alice.
-Pues ya me dio hambre...

Allen la miró y vio que andaba algo preocupada, aunque era obvio que se esforzaba en disimularlo.
-A mi tambien me entró algo de hambre -le dijo con una sonrisa sincera- ¿Que tal si antes de llegar almorzamos algo rapidito? Y me cuentas que es lo que te preocupa
Allen le tendió la mano y con un gesto de cabeza le indicó el camino al comedor del barco. Él tampoco estaba muy tranquilo que digamos, temía por la seguridad de las gentes de aquella ciudad, pero sabía que sólo podían esperar pacientemente a llegar a su detino y si en esa espera podían comer y ganar enegía mejor.

No hacía falta más Akumas, con solo tres Akumas nivel 1 había causado el caos en la entrada del Palacio de la Ópera. Sabía que sería un buen lugar para atacar, siempre lleno de gente.
Y los exorcistas no llegaban... peor para ellos.

- Jajajajaja... - me gustaba contemplar el paisaje: gente horrorizada, el suelo lleno de cadáveres, bueno, lo que queda de los cadaveres, polvo. - Que divertido!!!

Entonces una bala de pistola me rozo el brazo. Un guardia me estaba apuntando con su arma sin saber el terror que le esperaba...

- Ríndete maldito - gritó él, temblando de miedo.

En esa situación, decidí entrar en escena.
- Arco de la Oscuridad - el arco se creó en mi mano izquierda y con la derecha creé una flecha oscura - Despídete...

Apunté y lanzé, una espécie de fuego en forma de flecha atravesó el hombre, el suelo se tiñó de rojo al instante.
- jajajaj!!! Esto si que es divertido!!

Ambos chicos fueron al comedor y se sentaron.
-Ustedes también deberían comer algo.- les dijo Alice a los buscadores.
-No se preocupen por nosotros alice-dono y Allen-dono, debemos ir a ver si pasa algo en las afueras.- hablo un buscador.- Ademas ya hemos comido.
-Bueno...- Alice y Allen se quedaron solos, los buscadores vigilaban afuera esperando a ver señales de algo.
Mientras en el comedor los chicos por fin eran atendidos.
-Que bien, no había comida nada antes de venir para aca...- Alice miro él menu.- mmmmm.... quiero 5 platos de la lista de acá y 3 de esta lista de postres ^^
-co...mo...- el mesero quedo shokeado.
-Es algo liviano no Allen? ^^

Momentos después el msero traía los pedidos. Mientras el barco se acercaba a Sidney.

Allen la miro algo sorprendido. Era la primera chica que conocía con tal apetito.
-Un poco -le contestó Allen con una sonrisa para luego dirigirse al mesero- Muchas gracias ^-^
El chico veía a la chica comer felizmente, de hecho él estaba algo hambriento tambien pero el pobre mesero ya se había traumtizado lo suficiente por hoy como para hacerle otro pedido de tales dimensiones. Además hacia poco que había desayunado.
Alice no podía evitar parecer nerviosa mientras comía. A Allen le recordó a él mismo.
-Oye, ¿estas preocupada por algo?

Hubo una explosión detrás de mi, ni me giré para ver que era. Uno de los Akumas habia
hecho estallar una casa.

Después de matar al guardia me sentí vacio... quería matar a más gente, y lo hice. Disparé mis flechas de la oscuridad hacia la muchedumbre que quería huir. No vi a quien maté, però seguro que lo hice.

Se me acudió una idea:
- Akuma!! Subeme hacia arriba!!

Me subí encima del Akuma y se enlairó, cuando estuvo alto miré por todos los lados en la puerta del Palacio ya no había nadie todos corrín por una misma calle. Decidí atacar aquella calle con una flecha especial, metí la mano en el sexto bolsillo de mi chaleco y saqué una flecha-akuma. Esta flecha lleva un Akuma dentro y cuando la punta entra en contacto con algo el Akuma es liberado.

- Flecha de Akuma nivel 2 - la flecha salió disparada a una velocidad de vértigo se quedó clavada en el suelo casi al final de la calle, que es lo que yo quería.

Bajé del Akuma y vi el panorama. Un montón de gente atrapada en una calle, un Akuma nivell 2 delante y tres Akumas detrás... era una muerte segura... yo también fui allí para divertirme más...

La pregunta de Allen hizo que detuviera su comida.
-A decir verdad si.- exclamo ella.- ¬¬ este plato no me gusto... te lo quieres comer? ^^

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Ya estaban llegando, los buscadores que los acompañaban fueron a avisarles enseguida, a lo lejos se podía dislumbrar un gran humo saliendo de la ciudad de Sidney. Ambos chicos quedaron palidos por un momento, de seguro los akumas estban causando un gran alboroto.
Apenas el barco se detuvo Allen y Alice fueron los primero en bajar de él.

Allen se quedó pálido al contemplar aquella macabra escena. Varios akumas de nivel uno y uno de nivel dos atacaban a la gente sin piedad alguna. Un manto de cadáveres cubría el suelo y una risa macabra cruzaba el aire.
-¿¡Un Noah!?
Sin pensarlo dos veces activó su arma antiakuma, dispuesto a salvar el alma de los akuma y vengar la muerte de tantos inocentes. Si tan sólo hubieran llegado antes...
Apretó los dientes con rabia.

Me encontré con un hombre adulto, lo cogí por el cuello y apreté. Soltó un gemido, le dejé respirar, però solo para hacerle unas preguntas...

- Dime, buen hombre... Donde hay más aglomeración de gente? - le pregunté con una sonrisa.
- Para que lo quieres saber? Para matar más gente? - me escopió en la cara...

Controlé la ira, ese hombre me plantaba cara?...respiré... y decidí como matarlo...
- Flecha explosiva...
Como dice el nombre, esta flecha explota al mínimo contacto... puse la mano al 5º bolsillo del chaleco y la saqué...
- Te meteré la flecha explosiva por la cabeza... y estallará como un melón... - vi la cara aterrorizada del hombre, no me dió ni pizca de compasión.
Apunté en medio de la frente... estalló. Sangre...mucha sangre y carne humana saltaron por todos lados... Los sesos volaron en mil pedazos, uno de ellos cayó delante mio y lo pisé...
- Que asco... con lo poco que me gusta tacarme de sangre -.-

Me giré... y vi un muchacho que miraba el espectaculo horrorizado.

- Vaya! Por fin habéis llegado.

Todo se encontraba en destrozo por todas partes, si tan solo hubieran llegado antes.

-Oye tú, tipejo.- Alice se adelanto a Allen, este ultimo ya había activado su inocencia, Alice se sorprendió al ver que Allen tenía una inocencia parasito tal como ella.- mas te vale que dejes de hacer esto...- le ordeno ella, sin pensar en lo que hacía y solo guiándose por sus sentimientos y el deseo de vengar a toda esa gente que había sufrido.

Alice activo su inocencia al primer nivel y enseguida empezo a cantar una tonada muy linda, haciendo que los akumas que estaban mas ceracanos se destruyeran enseguida, los demás sobrevivientes aprovecharon para poder salir de ahí, al ver que aquellas bolas de metal se iban destruyendo.

Allen sonrio ante las buenas intenciones de Alice y comenzó a abalanzarse sobre los akumas, destruyéndolos a su paso con su mano izquierda.
Varios de nivel uno lo rodearon y comenzaron a dispararle.
Allen se cubrió con su inocencia y cuando se considero a salvo se volvió a abalanzar sobre ellos.

-¡CROSS GRAVE! -unas cruces atravesaron a todos los akuma que se encontraban cerca de él y se destruyeron al instante.

De fondo aún se oía la melodiosa voz de Alice entonando aquella cancion que extrañamente lo reconfortaba.

Mientras Allen destruía a esos malditos akumas uno por uno con su inocencia Alice seguían cantando.
-Allen te dejo a los akumas por un rato.- alice dejo de cantar y busco enseguida a la gente sobreviviente, antes de que el noah hiciera algo más.
Encontro a algunas personas, destruyo algunos akumas en su paso con su voz, para que las personas se fueran lejos del lugar, que ahora se había convertido en un lugar de batalla. Cuando creyo que no había nadie mas fue a ayudar a Allen enseguida y se dispuso a destruir a los akumas y a la vez buscando personas que salvar para que no muriesen en manos de aquel personaje.

Allen seguía destruyendo akumas. Con su ojo activado los fue buscando y destruyendo uno a uno.
Entonces oyó un llanto. Allen paró en seco y buscó de donde provenía. su ojo detectó un akuma y fue en su busca. Era otro akuma de nivel uno, que ápuntaba con sus cañones a una mujer con su hijo. Allen saltó sobre él y lo atravesó con su brazo.
La mujer lo miraba horrorizada.

-Esta bien, ya estan a salvo -la tranquilizó Allen con una cálida sonrisa. Le tendió la mano- venga.

La mujer tomo su mano y Allen la condujo a un lugar seguro para luego volver junto a su compañera.