Mision en Suva [Sadic Horus - Ichigo]

[Off: aunque me parezca raro, es casi increible que dos hermanos desde la superficie puede ver a travez de un lago oscuro lleno de tierra en las profundidades de éste, y puedan ver a Ichigo y todas sus acciones, aunque si dieron explicación, bueno u_u]

Ichigo seguía con su plan, la serpiente se acercaba cada vez más y con su boca enórmemente ampliada, unos segundos, unos segundos era para actuar, y no le quedaba mucho tiempo de aire a Ichigo para poder actuar, tenía que actuar ahora, o morir en el intento. Nadando se acercó hasta la serpiente y entró en su boca, agarrando la parte superior de la boca, ya dentro con su mano izquierda y sus piernas empujando la parte inferior de la boca, para que esta no se cerrara, y fuera a la parte superior del lago para sacárselo. Oportunidad suficiente para atacarlo, agarrar aire, y capturar la Inocencia, la cual estaba dentro de la misma, suponía.

Al llegar a al superficie, Ichigo no dudó en aspirar el fresco aire, el cual absorvió con todas sus ganas, y llenaron sus pulmones al instante. Con su brazo derecho, golpeo la parte superiro de la boca y haciendo un gran círculo rojo fluorecente empezó a crecer, lo cual hacía el rango de alcance de la explosión. Quitó la mano derecha para que diera a la explosión en seguida. La boca de la serpiente explotó, y una nube de humo pasó a la boca, saliendo de ésta. Al salir el humo había un hueco por donde estaba la explosión, y una piedra verde florescente estaba en el mismo. Era la Inocencia y la había conseguido. Era la hora de marcharse, y ayudar a su compañero, para que todo esto acabara. El cuerpo de la serpiente cayó en la orilla del lago, su cuerpo quedó inerte, sin movimiento, ya que Ichigo había arrebatado la Inocencia, quien la mantenía viva. Cansado salió de la boca de la serpiente con al piedra en la mano. Dispuesto a ayudar a su compañero.

{Off: Pero solo hago eso cuando la serpiente sale a la superficie y ahí puedo verla o_o... además, pensé que en tu anterior post ya te habías metido en la serpiente, pero si deseas, edito mi post anterior y cambio eso.}

Todo había salido mal; ya no tenía ninguna otra escapatoria y moriría allí dentro del torbellino creado por un simple exorcista novato... ese pensamiento hizo que el Akuma se sintiese peor; además de haberle fallado al conde y a Jasdevi. "Pues si vas a acabar conmigo..." Pensó mientras sentía los primeros intentos de cortaduras que no le hacían nada pero que tarde o temprano darían con sus puntos vitales y débiles "Te llevaré conmigo a la tumba, exorcista". Con el poco de fuerza que le quedaba, se acercó a un costado del torbellino, sacando así su brazo derecho y mostrando su hombro; el cual estaba descubierto de las vendas que rodeaban su cuerpo y mostraba una especie de cañón.

-¡BALAS DE AKUMA! -Le anunció riendo maniaticamente- ¡TE IRÁS CONMIGO, EXORCISTA -Dicho esto, lanzó los proyectiles hacia el chico mientras que sentía un corte preciso en el lugar débil de su cuerpo. Todo había acabado...
-Gracias, muchacho -Dijo con una sonrisa el alma de una adolescente que se encontraba atrapada dentro del arma y buscó la paz.


-¡Hey, exorcista! -Gritaron a coro ambos gemelos, buscando llamar la atención del exorcista de cabellos anaranjados.
-¡Tienes algo que es nuestro! -Le dijo el mayor.
-¡Devuélvelo antes de que nos pongamos de malas, hii! -Le siguió el rubio.
-¡O sino, Jasdevi te matará! -Rieron al terminar la frase.

El cabellos platinos, cansado por su pelea se inca casi involuntariamente para descanzar un poco y recuperar las fuerzas de su batalla, cuando de repente, unas balas akuma irían hacia el a toda velocidad. El chico lo que tuvo que hacer, con las fuerzas que tenía fue tirarse al suelo y esquivar las balas. Los proyectiles del akuma ahora muerto impactaron contra el suelo sin causarle daño a Horus, el exorcistas despierto y agotado yacía recostado mientras que la voz de la chica que ha salvado de aquel akuma le agradecía. Era lo que lo ponía satisfecho, una de sus misiones ha sido concluida... su pensar se mosraba pasivo al igual que su mirada aunque sus ojos delataban una sed de misterio y un corazón sombrío.

Las dagas gemelas se descomponerían en dos pequeñas partículas de energía para que volvieran a materializarse y forma el anillo que colgaba del cuello del joven exorcista. -Horus-sama!!!- Grita el buscador mientras que saliendo de un escondite consigue ayudarlo y asistirlo en su reposo. Invadiéndle los labios de fresca y pura agua lo rehidrata, lo levanta y lo ayuda a caminar a un árbol para que éste descance bajo la sombra del frondoso ancestro. La pelea continuaba mientras que el buscador permanecía cerca del exorcista de cabellos platinos estandoa lerta. -Gracias- La voz de Horus ya se había recuperado, su aliento ya había sido recobrado aunque faltaría la fuerza física para poder darle una mano a su compañero. El sol iba cayendo en el horizonte, el día iba siendo despojado por la noche y poco a poco el lugar se iría pigmentando de colores oscuros, al mismo tiempo que el lago reflejaría aquellas millones de estrellas que suspendidas pareciesen en el aire.

Ichigo hacía movimientos estúpidos, debido al cansancio de moverse tanto en el agua, controlar su respiración tan avanzadamente para él y las cosas tan rápidas que habían sucedido, pero su espíritu seguía.Para su desgracia, dos noah que estaban a unos metros de él, aparecieron, haciéndole la misión ,la cual en ese momento concluía, más difícil.-Si vienen a por al Inocencia... tendrán que... pasar sobre mí... hah...- Mostrando el reto, elevó su mano hacia los noah, dejando la palma de su mano hacia abajo, la giró y puso la palma de su mano hacia arriba, haciendo que lso dedos apuntara hacia él, diciéndo prácticamente,"ven". Con la Inocencia aún en las manos, se proponía a luchar con todo su espíritu, y con lo que le quedaba de energía.

-Tsk, todavía tiene fuerzas para provocarnos.
-¡Quitémosle las fuerzas y la inocencia entonces, hii!
-Sí, será lo mejor. Veamos como te defiendes de esto...
-¡Exorcista! -Gritaron ambos mientras señalaban el cielo que de la nada, adquirió un tono gris oscuro como si se tratase de una enorme tormenta, cuando en eso se pudieron distinguir a lo lejos miles de puntos que mientras se acercaban tomaban la forma de Akumas; miles de Akumas de nivel uno se acercaban al llamado de los gemelos Noah.
-Espero que te las arregles para pelear contra todos esos Akumas y de paso, defender la inocencia de nosotros, cabeza de naranja -Sonrió el mayor.
-¡Nee, Devi! -Le llamó el rubio mientras se volteaba y señalaba al exorcista de cabellos platinos que descansaba debajo de un árbol.
-Parece que el exorcista novato pudo contra ese débil Akuma de nivel dos -Sonrió- Y lo mejor de todo es que no está precisamente en condiciones.
-¡Es hora de que Jasdevi aproveche la situación!
-Cierto -Rió con su gemelo.
-¡AKUMAS, ATAQUEN A LOS DOS EXORCISTAS! -Invocaron a las armas que ya estaban próximas y estas comenzaron a hacer lo que le mandaban sus amos y comenzaron a atacar.

El joven de colores platinos veía como insanamente miles de balas color purpureo eléctrico se acercaban hacia su cuerpo inerte, que yacía algo más descanzado en el árbol. Rápidamente el buscador se esconde debajo de las raíces de un árbol que asilo y protección. El joven de cabellos platinos se levanta algo lento, levanta la mirada hacia la lluvia de akumas combinadas con ráfagas de balas virulentas para después gritarle a su compañero. -Hey Ichigo!!!... Pásame la inocencia, yo la protegeré!- Corriendo hacia su compañero exclama hasta llegar a una distancia media y activar de nuevo su inocencia. Avienta una de las dagas hacia Ichigo y esta formando un pequeño torbellino desliza la inocencia de las manos del exorista pelinaranja (la daga no le causó ningún daño a Ichigo). Decide correr de nuevo hacia el bosque, no sin antes esquivar balas akuma y destruir alguno de estos seres cuya alma esta en pena.

Justo antes de entrar al bosque se detiene y consigue guardar la inocencia entre sus ropajes y bien sostenida debido a sus tantos colguijes y cadenas (llamando la atención de la mayoría de los akumas). Esquivando la lluvia de disparos Horus da un tremendo salto hacia los akumas y comienza a destruirlos al por mayor, la nube estaba siendo difuminada por una luz intensa color aqua. Al cabo de unos minutos el joven exorcista cae rápida, pero seguramente al lado de su compañero exorcista Ichigo -Ya has hecho bastante camarada... yo protegeré de esto un momento- Las gotas de sudor corrían por su frente hasta su barbilla y de ahí caer a la costa, disolviéndose con el infinito color cristal del hermoso cielo del atardecer. La respiración acelerada de éste sujeto mostraban su cansancio.

Horus repite el mismo procedimiento que con el akuma de nivel 2, lanza su daga hacia los akumas para producir un gran remolino y así que varias miles de hojas (incluyendo ambas dagas) perforacen, corten finamente y fisuren a los akumas. Demasiadas explosiones ocurrieron al mismo tiempo ocasionando una gran explosión, la cual llenaría de un humo de color negro el lugar. La visibilidad para ambos bandos era nula. Horus retoma de nuevo sus dagas y ayuda a Ichigo a salir de ese lugar a uno más seguro. -Vamos, te llevaré a un lugar seguro... descanza un poco- Esperando respuesta positiva de su compañero le brinda una sonrisa de confianza y su hombro para que éste se recargara

Ichigo se sentía estúpido, su cuerpo estaba en manos de un espíritu que no sabía qué hacía, su cuerpo simplemente se movía como lo haría si estaba conciente, aunque realmente no lo estaba, breves recuerdos le pasaban por la mente, unos desde pequeños, hasta su edad actual. Podía escuchar voces, explosiones, aire golpeando contra su cuerpo, pero en ninguna reaccionó, debido a que no estaba realmente despierto.

Un sonido parecido al timbre que hacen los monitores del corazón cuando deja de latir el corazón. Esto aturde al peli rojo y lo deja sin oido durante unos minutos. Sentía como se caía lentamente, ya sus fuerzas no lo llevaban a naday sus piernas flaqueaban, por lo que iba directamente hacia el suelo, si no fuera porque algo duro le evitó la caida, caería de lleno. Era la espalda del Exorcista Horus, y venía en su ayuda. Ichigo lentamente cerraba lso ojos, debido al gran esfuerzo que hizo contra aquella serpiente. Antes de poder dormirse totalmente.-Gracias- Dijo con una voz apagada, luego de eso, oscuridad.

-¡Se lleva la inocencia, hii! -Avisó Jasdero a su hermano, señalando con el índice al exorcista de cabellos platinos que con la ayuda de su daga había tomado la inocencia y la había ocultado.
-¿¡Joder, no pueden esperar su muerte quietos!? -Gritó Devitt molesto- ¡Jasdero, tú encárgate de... -Pero antes de terminar la oración, se dieron cuenta de que gracias al torbellino que había armado nuevamente el primer exorcista, varios Akumas habían explosionado por los diversos cortes recibidos; los gemelos corrieron a un lugar seguro al otro extremo para poder respirar bien ya que el humo de los Akumas era altamente tóxico- Maldición... -Tosió un poco- Ahora no vemos nada.
-Tenemos que aprovechar el momento donde los exorcistas están cansados para que no se lleven la inocencia, hii! -Le recordó su hermano que se frotaba los ojos con las manos por el ardor que estos tenían- ¡Los bellos ojos de Dero, hii! -Se lamentó.
-Tienes razón -Carraspeó- Akumas, vengan -Ante el gemelo mayor se aparecieron los últimos Akumas que quedaban y no habían explosionado en el torbellino provocado por la inocencia- Veamos... son siete -El conocer el número le exasperó, ya no contaban con más Akumas y esos eran los únicos con los que contaban, luego no tendrían nada más- Estos exorcistas nos dieron más problemas de los que pensamos.
-¡Yo digo que hagamos un último ataque ya que se encuentran exhaustos, hii!
-¿Todo o nada?
-¡Sí!
-Pues... -Lo pensó- Es lo único que nos queda -Suspiró.
-Mandemos a los Akumas y en medio de la confusión robamos la inocencia, hii!
-Si tú lo dices, hagámoslo -Ambos sonrieron y se dirigieron a las armas.
-¡ATAQUEN! -El grito se escuchó en todo el lugar y los gemelos corrieron a través de la cortina de humo escondiéndose en ella mientras que los Akumas restantes volaron por arriba y los siete concentraron sus ataques en donde estaban los exorcistas.

[OFF: Estas diciendo que la cortina de humo es demasiado tóxica y Jasdevi se mete ahí?... Al parecer también les afecta pues se quitaron de ese lugar tosiendo]

Horus acostaba a su compañero en frente de los buscadores que al iniciar esta gran asaña se encotnraban con él. Rápidamente le dieron asistencia médica para que así pueda reponer el aire y sus energías pues su cuerpo estaba demasiado débil. Por el otro lado, el joven cabellos de color plata intenso cedía ante el cansancio aunque todavía podría aguantar un poco más, si sabe pensar bien sus movimientos. A lo lejos, se veían los entes acercarse, eran 7... una cantidad mínima y fácil de vencerles aunque la oscuridad de la nublada tarde-noche cubría sus verdaderos aspectos y sólo sus siluetas contorneadas negras eran iluminadas y detalladas perfectamente por aquellos proyectiles color purpureo eléctrico para alcanzar a desviarlos y lanzarse en contra de ellos, ya en el aire comienza a destruir a los akumas hasta que uno de ellos alcanza a darle en una de sus dagas y lanzarla al agua (no hubo daño físico directo a sí mismo).

Con ojos desesperados ve como la daga se va hundiendo en el fondo de aquel inmenso y oscuro lago, la luz intensa cada vez se hacía más y más nítida, pero tenía prioridades así que decide matar al último akuma. La explosión que produce éste último le sirve de impulso a Horus para dar un tremendo clavado al agua y entrar cual fina bala hacia el fondo del lago y rescatar su daga. El lago comenzó a ponerse quieto después de unos segundos aunque de repente unas burbujas comenzaron a salir desde lo más profundo y cada vez irían aumentando su tamaño y constancia, del agua salía aquel ser de platinos cabellos, rodeado de una ligera aura azulosa y sosteniendo ambas dagas a diestra y siniestra. Flotando en el agua, a causa del aire comprimido debajo de sus pies, esperaba a los gemelos que desaparecidos estaban, Horus buscándolos con la vista muy alerta daba un reposo a su cuerpo para continuar la batalla.

La herida de su hombro era más grave de lo que parecía, ya que había llegado al hueso, ahora, quitarlo sería algo más difícil. Estaba dormido, ¿podía sentir estándolo? otro problema era su corazón, si tenía demasiado dolor para su cuerpo el corazón latiría más lentamente y capaz de caer en un paro cardíaco.-Demonios... nos la puso difícil... veamos...-El buscador le quitó la camisa, ya que la mancharía de sangre, y en estos momentos no debían tener molestias. Los dos buscadores estaban nerviosos, ¿cómo podían sacarle la escama casi enorme en su hombro sin que lo sintiera y tubiera consecuencias? los dos se encontraban sudando. Uno, por su parte, bendándole las demás heridas sin importancia, y el otr encontrando la forma de quitarle la escama en su hombro izquierdo.

Pasaban los segundos y el tiempo se agotaba. El buscador, tomó una decisión bastante fuerte, pero si quierían salvarlo, tenían que hacerlo.Oye, Carry, sostenle las piernas, y por ninguna razón hagas perder la concentración. El otro buscador asintió con la cabeza y le sujetó las piernas, como su contrario le había dicho. El joven se acercó a la zona de la herida y se quitó su camisa debajo de su uniforme Beige. Se la puso en las manos. Tomó algo de aire y suspiró para agarrar tranquilidad, luego puso la camisa encima de la cara de Ichigo, impidiéndolo respirar. Se podían ver en sus labios que estaba contando ¿para qué? luego de unos 7 segundos exactamente, el buscador rápidamente le sacó la escama incrustada en el hombro de Ichigo, y le quitó la camisa de su cara, dejándolo respirar. Ichigo despertó, inspirando aire por la boca y sorprendido, pero no se podía levantar-¡Señor Ichigo!-Expresó su alegría el buscador. Carry, el que estaba en las piernas, se sorprendió ante tal hecho.-¿Cómo lo hiciste?-Preguntaba el buscador más viejo. El buscador más joven sonreía explicándole lo que había hecho.-Se supone que cuando dejas de respirar, el corazón late menos, y cuando tienes un dolor, late más, por lo que hice que dejara de respirar por 7 segundos, haciendo suficiente tiempo para que el corazón latiera a su mínimo, cuando le saqué la escama, el corazón empezó a latir más rápido, reactivándolo y ahora, está despierto.-Los dos empezaron a atender a Ichigo para que se recuperara rápidamente.

Se quedó estático y alerta en cuestión de que los gemelos salieran de su escondite. Espero un momento largo para decidir que hacer hasta que vió cómo su compañero era "resucitado" por los buscadores. Se dirige a él muy rápido y trata de ayudarlo a ponerlo en pie para poder escapar de ese lugar (ya con la inocencia apoderada). Sabía que su misión había concluio y le dice a el trío de personajes de largas túnicas protectoras color arena que se lleven a Ichigo al tren. Horus se quedaría un momento ahí para asegurarse que el par de noes no siguieran al herido así que demasiado alerta los va escoltando

Recobraba la conciencia muy lentamente, escuchando sonidos que no podía definir, ya que los escuchaba de manera muy grave y no entendía las palabras. Sintió un jalón de brazo que lo levantó automáticamente y recobró la vista en ese preciso instante.- ¿Pero qué?...- Preguntaba sin saberlo, ya que fue habitual de él. Sintió como lo ayudaban a correr, moviéndolo desde un empujón continuo de la espalda, obligándolo a avanzar. Era el buscador que lo había ayudado a no morir.-[cyan=cyan]¡Salgamos de aquí Ichigo![/color]- Pronto, no necesitó ayuda, ya corría por sí mismo. Pero su herida seguía sangrante, y eso le disminuía fuerzas.

Llegaron nuevamente al pueblo, y disparos se escucharon desde el bosque. Su compañero parecía que necesitara su ayuda, o no. No lo sabía, ya que pudo destruir a un Akuma nivel 2 en poco tiempo, entonces no tendría problemas en causarles perder el tiempo a los Noah.

Pudo llegar a la estación del tren, y entrar en uno de los vagones, pero todavía faltaba su compañero, quien faltaba por llegar. Losdos buscadores regresaron al bosque, ya que Ichigo podía estar solo con uno de ellos, mientras lo antedía podía sobrevivir, mientras que Horus necesitaría ayuda con sus enemigos, ya que debía estar cansado. Los buscadores vieron el panorama de la situación, e intentaron combinar algunas ideas para terminar con esto.

Horus continuaba cansado y cada vez se entregaba más a ser presa del agotamiento extremo, pero no dejaría morir a ninguno de sus acompañantes, siguió su camino alerta hacia el pueblo y de ahí al tren para escapar. Caminando lento y demasiado desganado iría por el bosque y atravesando el lago, las dagas exorcistas se denotaban todavía activas y listas para cualquier intromisión aunque el lugar pareciese silencioso en todo momento. Torpemente su paso era lento hasta que debido a una raíz salida cae al piso produciendo un sonido seco, sus dagas se desactivan y vuelven a formar aquel anillo que colgaba de su cuello. El silencio pronto reinó el lugar hasta que unos pasos a lo lejos se escuchaban, se venían acercando a él rápidamente y pensó que era algún enemigo así que decidió esconderse. -Horus!!!- Gritó uno de los buscadores para tratar de econtrarlo.

Su alma descanzaba pues venían a su rescate y con la voz demasiado débil los llama para que le asistieran -Aquí estoy-. Ambos buscadores se acercaron a él y con cuidado y delicadeza suma lo levantaron para llevárselo al tren, era obvio que no podría caminar y menos mantenerse en pie debido al enorme esfuerzo y cansancio así que lo cargaron y llevarlo al tren. Minutos después llegan al tren apresurados y lo acuestan levemente cómodo en un sofá, junto a Ichigo. Cayó víctima del cansancio y quedó inconciente, pero sin herdias graves ni nada malo, sólo necesitaría recuperación y algo de reposo. El tren ya ha avanzado y acelerado para dejar aquel pueblo ahora pacífico. Los trabajadores podrán regresar a pescar pues la serpiente a sido eliminada y en cuanto a los gemelos... no se aparecerán más por ahí pues ya no existe algo importante que los lleve a ese lugar. La misión ha salido exitosa y la inocencia resguardada y todavía escondida entre los ropajes del joven de cabellos platinos. Se han salvado todos los 5 implicados en esa misión, 3 buscadores y 2 exorcistas.

-Tardaste mucho...- Ichigo se encontraba cerca de él, hablando pasivamente y recostando la cabeza en la madera detrás de él, que estaba sentado en una silla.-Bah... no hice mucho comparado contigo... y sigues vivo...-Le sonrió al exorcista, mostrando que no se podía mover mucho. Sus piernas temblaban, el frío lo había dominado, ahora solo faltaba que el tren siguiera su curso, para ir a un barco, que les llevara a la Rama Asiática, y cada uno tomara su rumbo.

[Postea y terminamos la misión, luego reporta que la terminamos en ya sabes qué tema]