Casa de Coralie - Toulousse

-hace ya algo de tiempo... *dijo mientras tomo un poco de cafe* cuando estaba a punto de terminar mis estudios, tan solo me faltaban dos meses ¿has oido hablar de las guerras? *cerro los ojos* son lo peor.... se escudan en estupidas razones para matarse y provocar sufrimiento, pero eso pasa todos los dias *Coralie abrio los ojos, con un extraño brillo en su mirada* entonces tome la decision que debo eliminar a todos los humanos exceptuando a aquellos con buenas intenciones, pero como ya sabras.....sola no puedo, entonces fue aquel dia cuando le vi *con los dedos, jugueteaba de la inquietud*

-No sabria decirlo, ya sabia de mis intenciones cuando nos vimos, de hecho mas o menos me dijo que el tenia los medios suficientes para conseguir ese proposito, pero queria de mi colaboracion *sonrio un poco* requiere de mi lealtad y de que le sea fiel en todo momento, y asi fue desde entonces... he ascendido a consejera y tengo influencia directa en el presidente. Aunque ya me empezaba a preocupar, hacia mucho que no sabia nada del conde

escuche todo con atención, se veí un poco nerviosa para mi gusto, perfecto...
la mire tranquilamente luego de unos segundos para luego levantarme para poder acercarme a ella.

-espero que tu lealtad siga para siempre-comente despreocupadamente encarandola-si no cosas muy malas podrás pasarte y eso no les gustaria a tus padres ¿no?-

sonré de forma siniestras miesntras mi parte noah se mostraba un poco con aquella
sonrisa.

-jajajajajajajaja....-me reí alejandome de ella-y no te preocupes por Conde-tama, el esta bien... es más nos conto sobre ustedes... y me ofreció el venir a conocerte...-

*Coralie noto que Anastasia intentaba intimidarla....aunque ya se habia percatado en el bar sobre aquel lado siniestro, simplemente sonrio y no le dio mucha importancia al hecho, es mas....tal vez aprendiese algo de ella*

-Me alegra saber eso, podeis contar conmigo *termina de tomar el cafe* puedes contarme algo sobre ti, si quieres *digo con total simpatia*

-¿contarte algo?... ¿como que?...-pregunte meintras volvia a mi lugar en el sofa.

-no se.... *en el fondo si que sabia lo que queria oir, pero tampoco queria ir todavia al grano* algo sobre tu vida o que impresion te he causado

-hmmm.... algo de mi vida... ¿que puede ser?....-lo pensé unos minutos para luego saltar de alegría infantilmente-veamos... provengo de una familia en rusia... tenía hermanos... pero mi favorita era la menor de todos... a por cierto... todos murieron hace poco...-comente tranquilamente

-vaya....debistes pasarlo mal en su momento *digo levantandome y ofreciendole mi mano para que se levantase, queria llevarla a que viese algo*

-¿pasarlo mal?... hmm... no, no lo pase tan mal... solo lamento la muerte de mi hermana menor... los demás no me interesaban-

asegure mientras aceptaba su invitación.

-¿a donde vamos?-pregunte con infantil curiosidad.

-quiero que veas algo *la chica sonrio y la llevo a la entrada del piso, alli habia un muro falso que movio empujando un poco*

observe facinada como el muro se movia.

-jo... como si fuera una mansión... ¡genial!-exclame abrazando mi peluche-¿que hay allí?-

miraba con bastante intereses.

-es mi rincon *Coralie sonrio y la invito a pasar*

*Era un lugar bastante amplio donde se dislumbraba un pequeño jardin, todo el suelo era cesped y habian rosas creciendo en algunas partes donde mas daba el sol, pero lo que mas llamaba la atencion era un arbol del cerezo, aunque aun no estaba en flor, era lo mas bonito en el jardin*

*Cabia destacar que los edificios no contaban con ninguna ventana que diese a aquel jardin, de modo que era el mejor sitio para ocultarse de las miradas indiscretas*

-Ojala pudieras verlo en la temporada de los cerezos en flor *comento*

observe maravillada el lugar.

-muy bonito... en cierto modo me recueda a la habitación de Lance-kun-comente aún observando todo el lugar-oh... mejor aún nadie lo puede observar... difinitivamente es un agradable lugar... ya quisiera estar aquí en aquella época-

bastante maravillada por lo que veía.

-si lo viesen lo estropearian, mucha gente no tiene consideracion por cosas hermosas como estas *comento apenada* cuando solo haya gente buena entonces me gustaria mostrarlo para que lo admirasen

*miro hacia el cielo mientras sus ojos rojizos mostraban un destello especial*

-Hemos de esforzarnos en nuestro cometido ¿no crees?

-jajajajaja... ya lo creo...-comente observando el árbol -una hermosa vista sin duda... por cierto... Conde-tama ¿te ha dado algun arma?-

aquella pregunta era más que todo una corazonada dado que hace algún tiempo sentía algo bastante familiar allí