El infierno de Manaus

El avión oficial de la Conferéncia Episcopal aterró en el aeropuerto de la ciudad amazónica de Manaus. Una terrible tormenta tropical arrasó los barrios bajos de esa ciudad, provocando miles y miles de muertos y miles y miles de heridos. Situación idónea para sofocar los llantos por la gente querida y transformar Akumas.

Bajé del avión con 25 acompañantes, 23 de ellos eran Akumas. Sólo dos eran personas normales. Eso tenía una facil solución. Maté a uno y transformé al otro en Akuma.

Llegamos a los barrios pobres de Manaus. La gente lloraba por la muerte de sus seres queridos.

- ¡Atención! Soy un Arquebisbo y os traigo una buena noticia, ¡puedo resucitar a los muertos! - dije gritando en medio del gentío, la gente se agrupó a mi alrededor. - Sólo tenéis que gritar su nombre a este muñeco de aquí. - enseñé la forma primitiva de los Akumas.

Organizamos más de ciento cincuenta muñecos. La gente se puso delante de ellos. Alrededor, cientos de personas observaban el espectáculo.

- 3, 2, 1... ¡YA! - dije.

Todas las personas gritaron el nombre de sus seres queridos, al instante los muñecos cobraron vida y les arrebasaron la suya.

- ¡Ahora Akumas matad a toda la gente de los alrededores! ! Y también a toda la gente que ha visto las maravillas del Conde del Milenio!

Empezó el ataque a Manaus.

- Tengo una idea Juan...

- Dime mi señor.

- Vamos al barrio rico, tengo un plan magnífico. ¡¡¡Jajajaja!!!

----- Cambio de Escena -----

llegaron, se bajaron de Black y Megumi desactivo su inocencia y se dio cuenta de que llovia, derepente, escucho la voz de su compañera que le pregunta, ella solo respondio:
-no lo se, aunque deberiamos- dijo analizando el lugar...era como si hubiese ocurrido algo malo antes, debia ser precavida, esto era una mision y ella debia cumplirla como a de lugar

-mmm, no estoy muy segura, pero si, podriamos, de todas formas tenemos las inocencias-
dijo, aun analizando el lugar

estaban corriendo, hasta que divisaron una pequeña posada...
-White...- la mascota se separo de su dueña y fue a la cabaña, unos minutos despues volvio con Megumi.
-es seguro, entremos...-

entro al recinto, seguida de Tiffa, quien amablemente le habia habierto la puerta...entro y se dio cuenta de que habia alguien, pero no sabia en donde, hasta que el hombre hablo, era un buscador...quien ademas estaba entablando una conversacion con Tiffa, Megumi prefirio escuchar, no estaba acostumbrada a hablar en situaciones como esa...no a menos que se lo ordenasen.

-claro, en estas condiciones no se puede hacer mucho, lo primero es saber...¿hay inocencia aqui?- pregunto mientas se sentaba al lado de sus acompañantes

(off= me uno al roleo si no les importa^^)

Volví a el barrio pobre de Manaus. Cuando llegué el paisaje era fantástico. Todo estaba ardiendo, los Akumas disparaban a todos los lares. Casi no quedaba gente viva, las pocas personas que lo estaban eran brutalmente asesinadas por Akumas ansiosos de subir nivel.

- ¿Dónde se fue maestro Rouco? - me preguntó uno de mis hombres de confianza que se quedó vigilando la mascre.

- Fui al barrio rico con Juan y unos Akumas. - respondí.

- ¿Y cómo fue?

- Compruévalo tu mismo. - al instante aparecieron 150 Akumas más detrás de mi.

Evidentemente, fui al barrio rico para hacer más Akumas, maté a la mitad de gente y les obligué a los otros a resucitarlos. El barrio fue, miesteriosamente, congelado. Y con ello, toda señal de vida.
Ahora quería ver como ese barrio moría ardiendo.

- ¡¡¡Escuchadme todos los Akumas!!! - los 200 Akumas anteriores y los 150 nuevos pararon de atacar. - Creo que esta ciudad ya está suficientemente destruida, ¡¡¡id con el Conde del Milenio!!! - los Akumas empezaron a desaparecer en el cielo. - Un momento... vosotros quedaros aquí... - les dije a unos Akumas nivel uno y a uno del nivel dos.

Tras unos minutos me quedé solo con Juan, mis ayudantes de la Conferéncia Episcopal y unos 20 Akumas.
Entonces me di cuenta, que la lluvia estaba parando y que la humidad estaba matando al fuego que tanto anhelaba ver.

(OFF: you're welcome Lance ^^)

Megumi escuchaba atentamente al buscador, no era posible que hubiese tanta cantidad de akumas...supuestamente, su mision era salvar gente, eso significaba que habia ejecutado mal las ordenesvaya idiota habia resultado ser, de repente, White se puso bastante tenso, cosa que Megumi noto...

-Akumas...- lo sabia ya que, cuando habian tomado el tren a la orden, habian sido atacados por una orda de ellos, pero como idiota, no dijo nada y corrio a la salida de la casa, esa era su mision ahora, destruirlos.