Critica a : The Last Airbender

Reconozco que me gusta mucho Shyamalan; no a la manera en la que a un hombre le gusta otro, claro está, sino de ese modo mezcla de admiración y de imaginada complicidad, como si él y yo, y solo él y yo, supiésemos qué les falta y qué les sobra a las películas que se hacen en la actualidad.
No entraré aquí y ahora en una retrospectiva sobre su vida y su obra (una obra no demasiado profusa, de todos modos), pero sí que quisiera contextualizar qué significa “Avatar: The Last Airbender” (título original que fue modificado por la aparición del “Avatar” de James Cameron) para la carrera cinematográfica del director de origen indio.
Tras las fallidas “La Joven del Agua” y “El Incidente”, y después de desilusionar un poco al público general y soltarse de su mano con “El Bosque” y, en menor medida, con “Señales”, Shyamalan tenía la difícil misión de reconciliarse con todos aquellos que lo elevaron a los altares fílmicos con sus primeros proyectos: “El Sexto Sentido” y “El Protegido”, y volver a encontrar esa fórmula alquímica perfecta que fusionaba calidad y comercialidad a partes iguales.
Así pues, todos los que seguimos de una u otra manera a este genial (y algo incomprendido) director quedamos ciertamente desconcertados al saber que su próxima cinta iba a salirse de aquello a lo que nos tenía acostumbrados desde sus inicios.
“¿Una peli basada en la serie de animación de Nickelodeon Avatar: La leyenda de Aang? ¿Shyamalan? ¿Nuestro Shyamalan? ¿En ésto va a malgastar el que puede ser uno de sus últimos cartuchos?” pensamos al principio, no sin temor. Pero se trataba de M. Night Shyamalan… ¿Qué podía salir mal?
Pues parece ser que todo ha salido mal…
Hace pocos días se celebró la muestra oficial para la prensa de “The Last Airbender”, y la crítica general, desde los blogs y los magazines más destacados de Internet hasta publicaciones de la talla del New York Times han catalogado la película de horriblemente mala, infantil y de risa. Un rechazo unánime y firme, rotundo, casi consensuado y sin ambigüedad en las opiniones. Ver para creer.
Algunos críticos hablaron sobre las penosas actuaciones de los actores, mal elegidos y peor representados, (algunos aseguraron que parecía que los personajes estuvieran leyendo directamente del guión) e hicieron hincapié en el sinsentido que supone el argumento de la película, en el cual se suceden explosiones y peleas sin ningún tipo de orden o concierto. Un verdadero desastre que me cuesta asimilar viniendo de quien viene esta superproducción.
Y para más inri, en la famosa web Metacritics.com, site donde se realiza una valoración media de todas las críticas (tanto positivas como negativas) vertidas sobre un producto determinado (un libro, un videojuego o, como es el caso, una película), “The Last Airbender” ha conseguido hasta el momento un irrisorio 21%, una nota espantosamente negativa si tenemos en cuenta que dicho baremo a adjudicado un 87% a “Avatar“, un 57% a “Eclipse“, la última entrega de la saga Crepúsculo, o un 45% a la horrible “Dragon Ball Evolution“.
Por todo ello no sé qué pensar. Es de sobra conocido por todos que la prensa (y la crítica) denosta el trabajo del director indio, pero es tan firme la unanimidad en las valoraciones y tanta la negatividad…

Habrá que esperar a su estreno en España para comprobar en nuestras propias carnes si estamos ante uno de los fracasos más estrepitosos en la carrera de M. Night Shyamalan. Yo, de veras lo digo, espero que no sea así.