D. Gray man Rol
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Conectarse

Recuperar mi contraseña

últimos temas
Últimos temas
» Feliz año nuevo 2018
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyLun Ene 08, 2018 6:35 pm por Coralie Monich

» Blue Caos (rol +18) Afiliación Normal
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyVie Dic 01, 2017 9:27 am por Invitado

» Los Bibliófilos De Lima [Misión MI]
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyJue Nov 30, 2017 2:46 am por Constantine Gelassen

» [MN] Christchurch. Melancolía y suicidio.
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyDom Oct 15, 2017 1:27 am por Sigma-chan

» [MS] Rescate en Rapa Nui
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptySáb Oct 14, 2017 9:00 pm por Sigma-chan

»  — PARALLEL WORLD — YAOI +18 - Afiliación NORMAL
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyDom Sep 03, 2017 9:15 pm por Invitado

» Change of Season - Tumblr Promocional - Normal
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyDom Ago 20, 2017 10:55 pm por Invitado

» [MR] Reclutamiento Noah
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyMiér Jul 19, 2017 9:19 pm por Ismakun

» Buenaas!!
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyMiér Jul 19, 2017 8:03 pm por Ismakun

» Naruto Rol Storm
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyVie Jun 23, 2017 5:11 pm por Invitado

» Buenas .. buenas a todossss
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyLun Jun 19, 2017 9:59 am por Ismakun

» Obtener Rango Civil
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptySáb Jun 17, 2017 9:14 pm por Proxy

» Las estatuas de Namu
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyVie Jun 09, 2017 11:59 pm por Kanda Yuu

» Atrapados en la tormenta
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyVie Mayo 26, 2017 2:08 pm por Kala

» Mensaje atrasado
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyMar Mayo 23, 2017 10:37 pm por Sigma-chan

» Hola :3
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyDom Abr 30, 2017 12:32 am por Sigma-chan

» Vacaciones no vacaciones.
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyDom Abr 09, 2017 2:28 pm por Faith E. Wippler

» Poco tiempo.
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyMiér Abr 05, 2017 8:33 pm por Kanda Yuu

» Red Miles ; HS RPG | Cambio de Botón Normal
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyVie Mar 31, 2017 1:03 am por Invitado

» Ausencia u.u'
Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 EmptyJue Mar 16, 2017 4:39 pm por Kanda Yuu

Vota
Shiki Topsite!
+ Activos
Los posteadores más activos de la semana
No hay usuarios

Staff
Proxy
MP | Perfil
Alice
MP | Perfil
Coralie Monich
MP | Perfil
Faith E. Wippler
MP | Perfil
Wallace Campbell
MP | Perfil
Sigma-chan
MP | Perfil
Créditos
Skin realizado gracias a los tutoriales y recursos de: sourcecode, savage-themes, Nymphea y thecaptainknowsbest. Crédito y reconocimiento por su ayuda a la hora de elaborar el skin. Especial agradecimiento a Neeve (por la caja de perfil y las estadisticas) y Tony (por los widgets utilizados aquí).

Las imágenes utilizadas en el skin no son de nuestra propiedad, todas pertenecen a sus respectivos autores y son usadas sin animo de lucro. Sólo la edición y arreglo de estas pertenecen al foro.

Todo el material que se publique dentro del foro es y será propiedad de su creador a menos que se indique lo contrario.


Hermanos
Afiliados Élite
Determination (Undertale)Crear foroCrear foroUnderworld warHeroes Of OverwatchFate/Insane EclipseBálderook University photo untitled45.pngMisión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 40x40_zpsso7jd4wsLost SoulSeven Capital Sins | +18, Yuri, Hetero, Yaoi, Razas Mágicas School Crazy 40/40
Directorio

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Página 4 de 5. Precedente  1, 2, 3, 4, 5  Siguiente

Ver el tema anterior Ver el tema siguiente Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Dom Mar 07, 2010 9:01 am

(off: siento la tardanza XD una mocosa me contagió su resfriado, y también lamento el cutre post, prometo que el próximo será mejor @.@)

Había caminado, más bien tambaleado, durante un par de minutos siguiendo el rastro de las ramas de los árboles rotas que había dejado como estela. Sin embargo por alguna razón, tenía el presentimiento de estar siguiendo una dirección equivocada. Mi instinto decía que me equivocaba, a pesar de que el camino estuviera tan marcado.

-… Ya veo. –Murmuré, mientras me detenía finalmente, era terrible tener esa sensación de cansancio y tener que arrastrarla, me preguntaba como debían estar los otros dos. Con un poco de suerte el general también habría sido herido, por las pintas que traía, se me hacía la idea de que por muy herido que estuviera seguiría luchando solo por el mero instinto destructivo y sádico que emanaba, parecía estar ligado estrechamente a su tosca y brutal personalidad.

Sopesé la idea de estar siguiendo un rastro equivocado, uno que no fuera el mío, o que hubiera sido creado para despistarme o llevarme hasta otro lugar… ¿Alejarme de los otros dos? Quizás aquel cúmulo de almas en pena estuviera siguiendo la misma táctica que habían usado dentro del templo.

La respuesta vino cuando se escuchó la voz de Xavier en toda la extensión del bosque, canturreando como solía hacerlo yo cuando estaba de muy buen humor o me divertía a más no poder. La canción en si, era malísima, o su entonación era lo suficientemente mala como para que mis oídos amenazaran con sangrar, sin embargo su mensaje de metáforas feas, que harían llorar a los más altos poetas y compositores, era claro, afirmaba las sospechas que tenía.

Uno a uno, caeríamos todos ante su “inmenso poder”.

No hube terminado de retomar la marcha cuando otra onda blanquecina atravesó el bosque, obligándome a cerrar los ojos con fuerza para evitar cegarme una vez más. Las imágenes se sucedieron con fuerza, sin embargo y aunque pudiera verse claro para los otros dos, los trozos parciales de recuerdos de aquellos muertos aparecían en mi mente de manera desordenada, la imágenes se contradecían unas a las otras, y solo pude deducir, que solo podía ver, aquello que mi mente quisiera escoger, o que quizás en esas ondas blanquecinas, pudiera haber más de una versión de aquellos hechos dado que… dentro de Xavier se encontraban más almas a parte de la suya, otros puntos de vista, otra visión de lo sucedido.

Lo que estaba claro es que sus almas no estaban en paz, con su odio y cobardía al echar la culpa a alguien que había hecho todo lo que estuvo en su mano por protegerles, habían traicionado a la propia orden a la que servían, la antipatía que sentía por aquel grupo de idiotas que usaban un mismo cuerpo para vanagloriarse de un poder el cual ni de lejos se merecían tener. Tenía más claro que nunca, que aquellos idiotas debían morir, dejando al resto de las almas que había en su interior descansar en paz, y con un poco de suerte, podría robar esa inocencia.

Escuché una explosión a mis espaldas, alejada de donde me encontraba yo, seguido por una luz esmeralda que provocó que esbozara una sonrisa, podría ser una trampa, o podía haberse mostrado una vez más aquel buscador, estaba claro, que ya se había hecho a la idea de que nosotros no éramos rival, para ellos. Agarre con fuerza la materia oscura, y salí corriendo en dirección a la última onda que había dejado escapar Xavier
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Dom Mar 07, 2010 8:20 pm

Nakanaide, torawaretta gensou wo~kowashi…

Seguida aquella onda verdosa de la que había sido testigo Elaine, cerca de donde estaba Xavier se escuchó el estruendo de un cuerpo chocar violentamente contra un muro. Ruido seco, que dejó que miles de rastros de piedra y formación salpicaran hacia todas las direcciones hasta aterrizar en el suelo. Al compás de la escena, un gemido agudo de dolor hizo eco por aquellos alrededores.

Mist!—resolló Illya con los labios entreabiertos y la mirada ensombrecida por el flequillo desordenado sobre su frente.

Poco a poco fue descendiendo los pocos metros que la había alzado el impacto, hasta llegar al empedrado suelo y yacer ahí inmóvil, sentada con las piernas flexionadas y las manos apoyadas en el suelo, inclinada. De su boca exhalaba una suerte de jadeos y gemidos interrumpidos unos por otros. Sin detenerse a pensar mucho, fue incorporándose lentamente, abrazándose a sí misma ora por el dolor, ora por el sobrecogimiento que sentía ahora.

Xavier estaba allí, a su frente. Luego de estar varios minutos siguiéndole el rastro, conducida por su voz, que se escuchaba en todos lados, empero, por donde ella estaba se fortalecía, salió hasta otro claro. En el otro extremo estaba la muralla sólida de una montaña, rodeada en forma convexa de árboles y grama. El límite norte del bosque, hubiese sabido Illya de estar mirando la escena desde lo más alto, cosa que no era así en ese instante.

Él sólo se sonrió y agitó la palma en su dirección, la onda la golpeó, pero en vez de hacerla retroceder, flexionó y ladeó la muñeca de tal forma que logró que el cuerpo de la exorcista diese una media vuelta y se estampara contra la pared sólida y rígida de aquella formación natural… e inoportuna.

Ahora estaba allí Illya, sosteniéndose las costillas adoloridas y el torso amoratado con una mano, y la otra desenfundando rápidamente a Albtraum. El rifle derecho se deslizó de su funda con suavidad, e inmediatamente la muchacha apuntó y disparó en dirección al bastardo buscador. Eran balas normales, puesto que no hubo palabra alguna salida de los labios de ella que activaran la divina Inocencia. Impactó una en la inmensidad de los árboles, y la otra en el blanco. El hueso del hombro derecho de Xavier crujió al ser atravesado con un estertor, mientras la cacofonía del estruendo se agitaba en medio de todo el bosque. El hombre gritó de dolor una sola vez, y luego se restableció. De cierta forma fue macabro, como si se tratara de una máquina autómata que sólo exclamaba un dolor inexistente porque así lo dictaba su programación.

No es suficiente, exorcista.

Xavier la miró con ojos profundos, un brillo que aguardaba un millar de deseos y pensamientos dispares, pero erguidos en una decisión unánime. De un salto se abalanzó contra Illya, y la estampó de nuevo contra el muro rocoso. La exorcista soltó algo parecido a una exhalación cuando el golpe la dejó sin aire. La sostuvo entonces con una mano por el cuello, y la otra por la mano donde sostenía su arma anti-akuma y presionó. Fue similar a alguien que exprime un trozo de queso hasta que rezumase el suero, solo que en vez de eso, se escuchó el crujir de huesos e interjecciones dolorosas. Illya empezó a agitarse en el mismo instante en que su garganta fue trancada con rudeza, y ni una sola pequeña porción de aire le llegaba a la cabeza. Sus pies patearon miles de veces la zona baja del buscador, y sin embargo ello no fue suficiente para alejarlo.

¿Pero cómo? Si tiene el hombro… herido… no es posi…ble…

Desesperación. Una oleada inmensa de eso fue lo que sintió la exorcista cuando todo empezaba a llegar al límite. Los ojos comenzaron a ponérseles en blanco y el rostro amoratado. Las ojeras se remarcaron. Parecía una muñeca pintada con rímel, bajo la crueldad de un infante malcriado.

Ichido kiri no shuuen wo ageyou

Luego se detuvo de golpe. Fue como si alguien le hubiese susurrado algo al oído y él escuchase con ansiedad y preocupación. Xavier movió frenéticamente los ojos de un lado a otro, aflojando la presión inconscientemente, idéntico a un animal que huye de cazadores y busca el mejor lugar donde esconderse. Así mismo hizo.

Es la otra, la otra mujer —susurró como si hablara consigo mismo, con los ojos como platos, e iluminados en demencia pura y absoluta— se acerca. No podemos permitirlo —se contestó a sí mismo con un tono más severo— ¿¡pero a dónde ir!? El otro General también está cerca, en la dirección opuesta ¡Cualquier lado nos llevará a uno de ellos! —ahora lucía frenético. Las venas de las sienes se le hincharon— pues entonces los retrasaremos —decidió con voz monocorde, y luego observó a Illya que le devolvía la mirada con los ojos entrecerrados— Todavía no hemos acabado con ella.

La soltó, dejando que descendiera, como un muñeco de trapo desahuciado, de nuevo al suelo. Tenía alrededor del cuello la horrenda marca de su mano, oscurecida en un siniestro color purpúreo, tanto como la muñeca derecha. La sombra de los dedos de Xavier quedaron pintados allí, y era como un dolor palpitante. La exhalación de su sangre latiendo de nuevo por todo su cuerpo, con velocidad vertiginosa… se sentía horrorosa.

Hatasenai yakusoku wa mune no oku kogetsuite~

Akaku, akaku hageteku yo…


El viento sopló en una dirección al azar, pero Xavier supo que era una señal. Atrasó la mano donde estaba la Inocencia cautiva, y luego la adelantó rápidamente. Fue como una esfera de energía compactada, que se disparó fugaz, cortando el aire a su paso y produciendo un suave silbido a medida que se perdía. Iba hacia Elaine, la Legión percibía sus pasos y se unía con la naturaleza para adivinarla. Repitió el mismo acto en la opuesta, donde se mostraban las señales de que Socalo atravesaba en su búsqueda. El mismo silbido, la misma señal. El impacto de ello era similar a una implosión aguda, y podría arrasar por lo menos una buena tajada de la inmensidad del bosque.

Cuando todo regresó a ser silencio, antes de que explotaran contra sus blancos, Xavier tomó a Illya de nuevo por el cuello y comenzó a caminar con ella a cuestas. A pocos metros comenzó la exorcista a resistirse, aunque débil, más consciente de lo que sucedía a su alrededor. Le zumbaban los oídos y todo su cuerpo palpitaba bajo un calor abrasador que producía la sangre suya corriendo descontrolada por todas las venas de su sistema. Xavier chasqueó la lengua, de nuevo con aquel manejar autómata y rígido, y entonces apretó un poco más, logrando un atascado gemido por parte de la joven, aferrándola e impidiendo que se escapara.

Si te portas bien te dejaré vivir un poco más.

Con esas palabras que debían sonar compasivas, pero sin embargo, fueron neutras, él comenzó a alejarse de su posición actual. Illya sostenía con la mano sana la cadena de su Albtraum, y los rifles se arrastraban en el suelo, dejando una huella interminable, hundiéndose en la tierra, allá donde se posaban encima.



Off: Toma vitamina C, Mad, ya te lo he dicho .x. Espero que ambas se mejoren.

Mist! = ¡Maldición! en alemán.

Dejo la traducción de las frases en japonés, línea por línea. Y como podrán pensar, es una canción justamente. Y si, la canta Illya en su fuero interno.

No llores, destruye estas ilusiones cautivas,
Sólo por un momento, le daré fin a tu perdición.
La promesa incumplible arde hasta adentrar en mi corazón,
Y desgarra en un rojo ardiente~
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Mar Mar 09, 2010 5:17 pm

Continúe mi marcha hacia donde creía que se encontraba los restos del templo, sin embargo una onda verdosa hizo que girara la cabeza hacia la derecha. Por lo visto el tipo se encontraba más cerca de lo que creía, lo que hacía más fácil la búsqueda. Era hora de ajustar cuentas y no me contendría a pesar de que fuera un humano.

Salí corriendo hacia la brillante luz, mientras lo hacía giraba mi arma sin cesar y cortaba cuanto árbol se cruzaba en mi camino. Por desgracia no pude llegar muy lejos cuando una esfera del mismo color que las ondas impacto sobre mí. La velocidad era más de la que me esperaba para cualquier ataque, más que un general o un noah, lo suficientemente rápida como para no poder esquivarla por completo. La esfera me golpeo en el costado izquierdo, con tanta fuerza que me lanzo hacia atrás varios metros, pudiendo detenerme por el choque contra uno de los arboles que aun seguían en pie.

Caí sentado al suelo con varias costillas rotas y la parte del traje en la que había recibido el golpe, había sido quemada. Realmente no me importaba lo que le pasara a mi ropa, pero el hecho de haber sido golpeado de esa manera hacia que mi rabia aumentara y con ella las ganas de ensartar al causante de semejante ataque.

-Mierda, esta me la paga- dije con rabia.

Me levante dolorido, llevándome la mano izquierda sobre las costillas rotas, mientras que con la derecha sujetaba con firmeza la espada. Nuevamente emprendí la marcha aunque en esta ocasión a menor velocidad que antes. Con cada paso que daba notaba como mi propia sangre manchaba la palma de la mano. No estaba acostumbrado a aquella sensación, pero tampoco me molestaba, después de todo seguía siendo sangre, aunque no me gustara haber sido herido de esa manera.

-No soy un pobre novato muerto de hambre, soy un general y te voy a mostrar mi poder- dije apretando los dientes.

No tarde en llegue a un claro en el que parecía haber habido una pequeña batalla, o al menos un corto enfrentamiento. Pude apreciar como varias gotas de sangre recorrían el lugar. Por la poca cantidad de aquel líquido escarlata, pude deducir que alguno de los combatientes recibió varias heridas en su cuerpo, aunque no sabía a quién pertenecían.

¿Del buscador llamado Xavier? No se veía probable que fuera herido por alguien tan insignificante como el resto de seres que había en el enorme bosque, ¿entonces seria de una de las dos chicas? Si, esa era la opción más evidente y seguramente la correcta.

Seguí examinando el escenario de la lucha, y entre tanto golpes y desperfectos, pude apreciar un par de líneas de arrastre, además de varias gotas de sangre que dejaban un camino que fácilmente podía ser seguido.

-Mmm no sé si fue él el que fue por aquí, pero es lo único que tengo para encontrarle- pensé observando con detenimiento las marcas.

Deje de dudar y emprendí nuevamente la marcha, esta vez no por tierra, sino que en esta ocasión fui saltando de rama en rama, pasando entre los numerosos árboles haciendo el menor ruido posible. Esta vez no quería que se me escapara mi presa si es que en realidad se trataba del hombre.
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Miér Mar 10, 2010 10:57 am

No llegaba a entender el por qué había empezado a correr hacia el lugar de donde se había visto aquella onda de color verde, con un poco de suerte quería pensar que aquel buscador y su séquito de almas dementes estaban atacando al general, sin duda el tendría más resistencia y sus ataques podrían dañarlo más, si por el contrario aquel ataque iba dirigido a la chica maravilla… Se podía ver que era la menos experimentada… ¿Cuántos ataques de ellos podría aguantar?

Es más por curiosidad que preocupación, me dije con aire despreocupado lo suficientemente convincente como para creerme lo que había dicho. Siempre había sido una jugadora consecuente, ya no tenía derecho de permitirme tener más humanidad. Una asesina, era una asesina siempre, una vez elegido el camino no podía cambiarlo así por que sí…

No había vuelta atrás, Blanc lo sabía, Cheshire también aunque nunca hubiera querido aceptarlo y yo era plenamente consciente. El simple hecho de haber descubierto mi recién adquirida empatía era la prueba de lo cansada que estaba, solo necesitaba desconectar… olvidar, y aunque nada volvería a ser como antes, al menos encontraría la manera de rematar la parte molesta de mí que intentaba salir a la luz.

Escuché algo, un sonido antinatural que sin duda no era producido por la naturaleza, sentí como la piel de mi cuerpo se erizaba, cual gato cuando siente atrapado ante un peligro inminente, fue entonces cuando la vi, esférica y del color de la esperanza decían, sin embargo esta lucía más verdosa, la energía de esa onda redonda era compacta sin contar que era veloz, más veloz de lo que habían sido hasta ahora los ataques de Xavier, tenía la certeza que si no esquivaba aquella cosa iba a quedar calcinada y con treinta huesos rotos, posiblemente mis órganos quedarían hechos puré…

-Puré de vísceras… hm. –Sonreí alegremente mientras abría la sombrilla de nuevo, y salté sobre la esfera asestándole la punta de la materia oscura con fuerza, a la vez que abría el paraguas para usarlo de escudo.

La pelota verde terminó por estallar creando una onda esmeralda que nos aventó a la materia oscura y a mi, haciendo que nos arrastráramos por la tierra hasta chocar contra el nacimiento del tronco de uno de los muchos árboles que había en el lugar, otro estallido me hizo pensar que no era la única que había sido atacada por aquella maldita esfera.

Palpé con la mano derecha, la cual volvía tener algo de movilidad, algunas zonas de mi cuerpo para asegurarme que no tuviera nada serio, tenía una ligera contusión en la cabeza, de la cual emanaba un fino hilo de sangre que recorría todo el lado derecho de mi rostro, y por lo borroso que veía con el ojo izquierdo, quizás podría haberme reventado alguna vena ocular. Por lo humedecido que se encontraba mi costado izquierdo era probable que me hubiera roto algo, pero no había sido suficiente como para hacer que me rindiera, tendría que cortarme las extremidades para que empezara a sentirme algo frustrada.

Me puse de pie, apoyando la materia oscura sobre uno de mis hombros y empecé a caminar, cuando escuché otro sonido que de natural tenía poco, al menos antinatural para cualquier criatura del bosque, cuando alcé la mirada al cielo, pude observar que varios metros hacia mi derecha algo se movía en las copas de los árboles.

De manera que alguien hubiera podido calificar de poco inteligente corrí hacia el lugar donde había visto aquel movimiento, cuando tropecé con algo. Mis ojos se posaron en la tierra que pisaba ahora, había un ligero hundimiento, provocado por algún objeto pesado, me puse de cuclillas para poder apreciarlo mejor, cubriéndome el ojo herido con una mano.

También había gotas de sangre, la cosa se veía mal, porque el único objeto que podría haber hecho una línea así (la cual iba acompañada por otras más anchas que indicaban que alguien estaba siendo arrastrado) era o la punta de mi paraguas o uno de los rifles de la chica. Cuando rocé con la yema de mis dedos la sangre del suelo lamenté no tener a Derain junto a mí para que pudiera decirme a quien pertenecía. Volví a ponerme en pie con una expresión profunda de molestia, y me decidí a seguir el rastro dejado por el tipo aquel. Nos estaba esperando, no le dábamos ningún miedo, porque a sus ojos deberíamos estar lo suficientemente débiles como para llegar a ser, presas fáciles, incluso estando unidos.

Pero el juego había terminado, pensé a la vez que chasqueaba la lengua y con mi mano herida me apretaba el costado contrario. No importaba como estuviera mi cuerpo, iba a destrozarles, por mucho que hubiera almas en contra de las acciones del resto, ensartaría a aquel buscador maldito y no desactivaría la materia oscura hasta que le saltaran sus grotescas orbes de demente de sus cuencas oculares.


Última edición por Mad_Hatter el Mar Mar 16, 2010 11:56 am, editado 2 veces
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Miér Mar 10, 2010 11:06 pm

Al poco tiempo de ser arrastrada en el suelo, Illya notó que le sangraba la cabeza. Había estado inconsciente de su propia condición mientras la silueta de lo alto de las copas de los árboles, y la montaña empedrada, se movían y desdibujaban frente a sus ojos continuamente. Desconocía hasta donde la llevaban, o con qué motivo (después de todo, Xavier habría podido matarla antes… si hubiese querido). Sólo sabía que ahora, tantos minutos de embotamiento pasados, el dolor comenzaba a alzarse en oleadas flamantes, en varias direcciones de su cuerpo. La sangre que manaba por su frente formaba un río que pasaba en medio de sus ojos, se desviaba cerca de su nariz, y acababa deslizándose gota a gota en el suelo momentáneo por el que pasaba desde su mentón. Le pintaba el rostro de sangre roja y fresca, caliente, y si se concentraba con cada respiración, palpitante.

Xavier continuaba caminando, aferrándola con la misma dureza inicial, y lastimando su ya magullada piel, amoratada y marcada gracias a su descomunal fuerza. Sus pasos apenas eran breves y ligeros rumores en el suelo, pisando la tierra y una que otra hoja seca con suavidad.

¿A dónde me llevas?

Su voz trémula fue una cruel enajenadora del silencio. Resonó decibeles más altos que los pasos del buscador, e irrumpieron en los alrededores como un eco lastimero y acusador. Él sin embargo continuó caminando.

El mejor lugar para matarlos… está cerca —fue la ambigua respuesta.

En un instante, los ojos del buscador relucieron entre las sombras de su capucha, como si dentro se removiese una fuerza abrumadora que en esos momentos se inquietaba ante algo o alguien de quién Illya desconocía. Cuando los primeros destellos dolorosos de recuerdos inconexos, gritos y palabras desordenadas, asomaron en la mente de la bella exorcista en contra de su voluntad, exhaló un gemido desde lo más profundo de su garganta.

No lo hagas, ¡espera!

Tarde. Fue la misma sensación de verse invadida por la fugaz onda blanca de la que ya se estaba acostumbrando, empero, la sensación era aún más brutal. Verse abducida a una escena, un encuentro, un recuerdo, era soportable, pero algo como lo que comenzó a desatarse sin ton ni son en ese momento dentro suyo, fue excesivo.

Illya soltó un alarido. La sensibilidad extrasensorial de la que era poseedora remarcó cada momento, cada silueta que se dibujaba en su mente y nublaba sus ojos. Sin darse cuenta gritó una y otra vez, con las manos puestas sobre su cabeza que palpitaba rápidamente. Sus orbes se dilataron, mostrando una fina capa de color caramelo intenso, y un negro apenas visible; con los ojos abiertos de par en par por el shock, asemejaban los de un gato alumbrado por el intenso resplandor del sol.

¡Que te detengas! —exclamó revolviéndose inquieta— ¡Basta ya!

Eran sus muertes. La de cada uno, detallada, sentida, experimentada. Se daban en una insólita cámara lenta, y el grito desgarrador de algunos, los llantos de otros, y las palabras desesperadas de la mayoría, eran escuchadas dentro de su cabeza con un volumen sobrenaturalmente alto, malicioso. Las escenas eran tan vívidas, tan directas, que sentía ser ella la que moría una y otra, y otra vez.

Ustedes no lo entenderían… no saben de nuestro sufrimiento. No saben del sufrimiento de ellos, de nosotros, de todos. Creen suponer muchas cosas, pero la verdad es que no entienden nada.

Xavier sentenció ello con voz autómata, continuando su caminata, inmutable ante los chillidos de la exorcista y el dolor que se le conglomeraba en la garganta. Sus ojos, vedados de algún sentimiento descifrable, único y absoluto, continuaban observando el horizonte fijamente.

¡Eres tú el equivocado! ¡Son ustedes!

El buscador abrió los ojos de par en par y se detuvo para voltear a mirar a la exorcista, sorprendido. A pesar de la marea de emociones contradictorias, Illya lo miraba con un brillo fiero y demasiado profundo en lo alucinante que se habían convertido sus ojos. Xavier, y gran parte de la legión admiró la fuerza que desbordaban los apóstoles de Dios sin importar la situación. El ideal hizo que se revolvieran con dolor y martirio, era como cederle un paso más a su enemigo natural, tanto como al intruso que también ocupaba un sitio dentro de la cárcel corporal en la que se hallaban.

Porque están heridos y resentidos hacen todo esto, y provocan la destrucción a su paso diciendo que es la mejor y verdadera forma de acabar la guerra. Porque tienen miedo, entonces se ocultan detrás de la ira para justificar aquellos actos irracionales que iniciaron la tortura que han pospuesto desde hace más de diez años.

Mientras hablaba, encima de sus cabezas, una verdadera bandada de Akumas se acercaba recia hasta donde se encontraban. Eran miles y miles de puntitos negros en la lejanía del cielo, que casi eclipsaban el poco sol que quedaba, y cubrían las grises nubes, pintándolas de un color más macabro. Era como haber revuelto un avispero, eso era lo que asemejaba el enorme ejército.

Sin embargo, ni Xavier ni Illya prestaron atención a ello, ambos enfrentándose mutuamente con gestos contrarios. De repente aquella fina aureola caramelo se contrajo dolorosamente hasta ser medianamente redonda. Esa mirada reflejaba tristeza, además de la furia chispeante dentro. Illya apretó los labios compungida y luego los entreabrió sublime.

Era solo miedo… fue solamente eso —susurró casi con pena.

Xavier la soltó de golpe, como si de repente el contacto con aquella exorcista le quemara. La mirada desorbitada mostraba algún tipo de reacción en conjunto por parte de todos, y cada uno de los espectros que seguían apoderándose de aquel cuerpo al mismo tiempo. Sin darse cuenta, comenzó a temblar y agitarse violentamente.

¡NO LO SABES!, ¡TÚ NO LO SABES!

Pero sus gritos, sus chillidos, eso gemidos furibundos y agudos que exclamaban todos, demostraban claramente que en realidad sí, lo sabía.

El buscador se desquitó con los Akumas. Lanzó furioso una onda verdosa en esa dirección que pareció aún más devastadora que las anteriores. Mientras convertía en ceniza todo a su paso, gritó y gritó como un aullido desgarrador de ira e inquietud.

Illya lo miró, intentado pararse, mientras aferraba sus pistolas. Parecía sentir una mezcla de preocupación, incomprensión y determinación en su interior, mirando a Xavier descontrolado.

¿Te ha dolido saber que alguien puede leerte, o mejor dicho… leerlos?

¿QUIÉN PODRÍA SABERLO? ¡NADIE! ¡ABSOLUTAMENTE NADIE!

Chillaba y chillaba, lanzando su poder en contra de todo lo que se movía a su frente. Los Akumas comenzaron a dispararle también, tratando de evitar ser consumidos por aquella voraz energía que pugnaba desde el interior del hombre. Todo era estruendos, temblores, y gritos fantasmales de dolor y furia. En un momento dado, Illya pareció notar algo distinto en el buscador.

Xa-xavier… ¿qué está ocurriendo?

Era la Inocencia. La mano del buscador, antes intacta, comenzaba a reducirse a un muñón sanguinolento dónde se encontraba atascado el cristal verde. Humo vaporoso se desprendía de allí, e Illya percibió el olor a carne chamuscada. La visión le contrajo el estómago en un nudo.

¡¡Detente!! ¿Qué no ves que eso te está matando?

Sus propias palabras la tomaron desprevenida.

¿Te estás preocupando?, ¿sientes misericordia de ese desdichado ser, maldito y detestado por sus acciones?

No es eso
—se refutó— ¿Qué pasaría si al final no hay descanso eterno para ellos? ¿Qué sucedería si la Inocencia se los lleva al infierno? Allí dentro hay esencias inocentes. Allí dentro hay una persona que lo dio todo y a cambio, no recibió nada que no fueran maldiciones y desprecios…

…Y aún así él los perdonó.


¡¡BASTA!!

Xavier se detuvo, aturdido por el grito, entonces todo quedó en un absoluto silencio. Miraba perplejo a Illya, la legión la observaba verdaderamente por fin. Luego volteó abruptamente hacia otra dirección, siguiendo el sonido que el millón de esencias podían sentir dentro de la naturaleza circundante. Ellos, los otros dos, se acercaban también.

Escondió ambas manos detrás de su espalda y aguardó. Antes de vacilar, culminaría el trabajo que se había predispuesto luego de tantos años de espera.



Off: empieza la cuenta regresiva para Xavier~
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Dom Mar 14, 2010 9:53 am

Continúe mi marcha de rama en rama, de árbol en árbol, atravesando el bosque en busca de mi tan apreciada presa. No tarde en encontrar algo que me indicaba que iba en la dirección correcta, y fue un grito, el cual fue arrastrado por el aire hasta llegar a mi posición. Por lo que parecía se trataba de la inútil exorcista y por el alarido, deduje que se había encontrado con el buscador y que este la estaba haciendo sufrir algún tipo de agonía.

-Se lo tiene merecido por meterse donde no le llaman- pensé mientras continuaba con mi incesante búsqueda.

Lo que al principio resulto ser un simple grito, pronto se transformo en varios de ellos, sucedidos de una seria de frases que indicaban un gran dolor. En ese instante decidí aumentar la velocidad, no por el peligro y sufrimiento por el que estaba pasando la joven exorcista, sino porque era posible que pronto se callara y perdería la mejor oportunidad para encontrar al tipo molesto.

Pasados varios segundos desde que los gritos se aplacaron, una ráfaga verde se elevo hacia el cielo. La onda hizo que todos los arboles se agitaran con fuerza, lo que empeoro cuando la cantidad aumento en gran medida. Todas y cada una de las ondas eran lanzadas hacia diferentes ángulos, pero todas apuntando hacia el cielo, en donde se podían escuchar diversas explosiones. Estaba claro que los destinatarios de semejantes ataques eran los akumas, los cuales aun persistían en su intento de cazar al buscador.

Baje del árbol en el que me encontraba, para reanudar mi marcha a pie. Con las diferentes ondas siendo lanzadas hacia distintas direcciones, corría el riesgo de recibir un nuevo impacto si continuaba por arriba.

No tarde en llegar al lugar en donde se encontraba el supuesto exorcista junto a la chica de los rifles. El silencio reinaba en la zona, como si estuviera esperando a que llegara, permaneció allí parado sin inmutarse por mi presencia.

-Por fin llegas para presenciar el último acto- dijo con una amplia sonrisa el buscador.

Despegue la mano izquierda de la herida que tenía en las costillas, mientras que la derecha hacia girar la espada con rapidez.

-Es hora de que te ponga en tu sitio cucaracha inmunda- dije con tono de desprecio.

No tarde ni medio segundo en abalanzarme hacia el tipo y lanzarle un fuerte golpe hacia la cabeza, pero el buscador reacciono colocando la palma de su mano delante suya y lanzando una pequeña onda que no era de ataque, sino que era para bloquear el inminente corte. La hoja de mi arma choco con dicha onda, produciendo que ambos fuéramos desplazados hacia atrás.

La ira y rabia eran cada vez mayores en mi, por lo visto además de haberme herido de varias formas, era capaz de bloquear mis ataques, aunque notara como su poder era menor que al comenzar el día. Como todo usuario de inocencia, era lógico que llegara a cansarse por el abuso de esta y más si no era compatible. Aquel tipo solo era un cuerpo rebosante de almas, el cual buscaba venganza hacia todo ser vivo en el planeta, lo que significaba que estaría llegando a su límite. Este pensamiento se hizo mayor cuando pude ver como varias gotas caían al suelo, procedentes de la mano en la que estaba incrustada la inocencia, la misma mano que ahora tenía cerrada, como si tratase de esconder este hecho.

Sonreí de manera macabra al contemplar ese daño y me lance nuevamente al ataque, sin embargo esta vez me moví rápido, saltando de un lado en otro hasta el punto que el tipo llego a perderme de vista, lo que supuso recibir un corte horizontal en la espalda, el cual llegaba desde una clavícula hasta la otra. Pese a que el corte no era muy profundo y que lo hice con la intención de que sintiera dolor, el tipo llamado Xavier se giro de manera brusca y me lanzo una nueva onda de energía, la cual me lanzo volando hasta chocar contra otro de los arboles allí presentes.

-No eres rival para mi, ninguno los sois, pagareis por vuestros pecados-

Me levante dolorido por el pinchazo que me producía la herida de las costillas y nuevamente me lance la ataque, pero en esta ocasión no le golpee con la espada, sino que le aseste un fuerte puñetazo en pleno estomago, el cual hizo que retrocediera un par de pasos hacia atrás. El supuesto exorcista se inclino levemente por el golpe, para que poco después asestarme él otro puñetazo a mí en la herida del costado izquierdo, a lo que respondí con un nuevo golpe, pero esta vez en la cara.

Ambos retrocedimos varios pasos hacia atrás, mirando con rabia al oponente que estaba en frente. Ninguno tenía la intención de retroceder ante semejantes ataques, solo queríamos continuar machacando al otro, solo queríamos dañar al otro, en definitiva solo queríamos matar al otro. Pero en ese instante algo cambio en el rostro del hombre, como si algo se removiera desde su interior, algo que le hacía permanecer paralizador por unos breves instantes.

-No…tengo…mucho tiempo, está llegando a…….su límite, por….favor liberarme…..de este sufrimiento-

El tono de voz me recordó al de una de las pocas almas que estaban contrarias a la idea de Xavier ¿era posible que se tratase de la del exorcista atrapado? Bueno si lo era en definitiva no impediría que detuviera mis golpes. De esa forma lance un nuevo golpe de abajo hacia arriba y que impacto en la mentón del tipo, haciendo que cayese de espaldas al suelo. Pese a lo que pudiera parecer, el buscador se levanto con su típica seriedad reflejada en el rostro, por los visto había vuelto a recuperar el control del cuerpo.

-Ese estúpido cree que puede detenerme, pero se equivoca, nadie puede detenerme-
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Mar Mar 16, 2010 12:47 pm

Había hecho aparición un poco antes del momento en que el General se tiraba sobre el buscador, era una escena un tanto grotesca para mi gusto, amorfa y antiestética también. Al lado del exorcista de brillante armadura, todos se veían pequeños, frágiles… Hasta cierto punto débiles también, pero había algo en ellos que lograba eclipsar la furia y la agresividad del general.

Era su deseo, la venganza sin sentido convertida en la más grande ambición. No era solo el poder que les daba la inocencia del exorcista, si no la resolución que todos tenían (a pesar de que unos tuvieran sus diferencias) en terminar con eso, queriéndonos hacer participes de todo el sufrimiento, el odio, la desesperanza y el miedo que llevaban sintiendo ellos por tanto tiempo. Por eso precisamente, Xavier era consciente de que no tenían nada más que perder, lo único que harían ahora era arrastrarnos junto a ellos a aquel infierno eterno que supondría en cierto modo para ellos su descanso… su destrucción.

Las palabras de la chica maravilla aún flotaban en mi cabeza, las había logrado escuchar de lejos, aquellos gritos que imploraban, o más bien ordenaban, al buscador que se detuviera. Me hizo preguntarme el por qué se preocupaba por alguien que había estado a punto de matarla, al menos ahora que estaba cerca de la chica podía ver que era la que más daño directo, incluyendo quizás el dolor psíquico, había recibido. La respuesta vino rápida, fugaz, a mi cerebro. Aquella nota de suplica en las exclamaciones de la chica maravilla eran producidas por la incertidumbre de lo que podía pasarles a las almas inocentes y que estaban en contra del resto.

Aquella idea me hizo sonreír con cierta ironía, sin duda la exorcista de los rifles tenía… un alma demasiado pura, en un principio había pensado que había sido mala suerte para ella haberse visto atrapada en aquella misión suicida en la que podría añadir varios traumas más a la lista de los que seguro ya tenía.

Sin embargo, ahora, por la manera en la que ellos actuaban con ella, como si le temieran de alguna forma, me hacía creer que era precisamente por la fuerza que irradiaba sualma, lo que le hacía única, podría ser por eso quien lograba hacerse escuchar por la legión. Y quizás, solo quizás por ella fueran a tener una oportunidad de no terminar atados todos al infierno al cual íbamos a mandarles como volvieran a atacar una sola vez.

Xavier volvió a juntar sus manos aprovechando el momento en el que general se había detenido luego de lanzarle al suelo de un puñetazo en el mentón, un golpe que por su fuerza y el tamaño del puño de aquel… exorcista, debería haberle descolocado la mandíbula, pero aquello no había logrado detener al buscador, el cual se había levantado del suelo cual autómata sin reflejar una sola mueca de dolor, aquello resultaba no solo irrisorio sino que hasta cierto punto me chocaba.

Era como estar torturando a un insecto, arrancándole trocitos de su anatomía poco a poco, despacio, con altos grados de crueldad del cual solo un sádico sería capaz de tener y sin embargo a pesar del dolor el bicho volviera a reponerse como si con aquella acción le retara a preguntarse hasta donde era capaz de seguir sin sentirse como un monstruo.

Lástima, pensé mientras sonreía levemente con resignación. Estaba claro que el pobre bicho (uno con un poder temible) no había tenido suerte al encontrarse al menos, con dos personajes que conocíamos muy bien cuan lejos podíamos llegar sin que aquello pesara en lo que… supuestamente era la conciencia.

Aprovechando la proximidad que tenía con el buscador, le asesté la materia oscura en la espalda, haciendo que soltara una descarga lo suficientemente larga y potente como para que las convulsiones duraran unos minutos, la pequeña onda que logró lanzar hacia mí me hizo retroceder para desviar parte del ataque, escondiéndome tras el paraguas. Sin embargo el daño a sus nervios estaba hecho, y aunque no sintiera dolor, su cuerpo seguía teniendo aquellos espasmos involuntarios provocados por la electricidad que dañaba sus tejidos nerviosos.

-Todo ha terminado. Podremos morir pero finalizaremos nuestra causa, y vosotros no podréis hacer nada más que burdos intentos para impedirlo. –La voz salió gutural y profunda desde algún rincón del cuerpo del buscador, el cual seguía temblando con fuerza, sin embargo sus palabras no se vieron alteradas por ello. Lentamente fui girando la cabeza para ubicar el sector donde se encontraba la chica exorcista, como esperando a que hiciera o dijera algo.

Quizás fuera capaz de lograr algo, al fin y al cabo era la única que parecía captar la total atención de la legión. Decían que los niños eran capaz de ver cosas que los adultos habían dejado de ver por que su forma de racionalizar se lo impedía, por eso quizás ella tuviera una oportunidad con ellos…

Solo quizás, al fin y al cabo era una niña, y por alguna razón, seguramente el cansancio que sentía ahora junto con la carencia de más ideas me hicieron esperar que por alguna remota posibilidad ella tuviera la respuesta de cómo… solucionar aquello.
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Mar Mar 16, 2010 9:41 pm

Off: me toca ser el personaje cliché que abre una brecha de esperanza (¿?)


Illya quedó paralizada, parada en su lugar mientras a sus ojos se libraba la batalla entre Xavier y Sócalo, la que luego deliberó hasta la presencia de la otra mujer, la sospechosa, que sin mucha vacilación se dio a conocer, por su sobrenatural habilidad, y el origen de esta, como una aliada del conde. Sabía de ellos por Komui y sus palabras. La Orden estaba conmocionada ante tales rivales, personas normales que vendían su alma al Milenario por poder y poder, en todos los sentidos. Muchas veces ella se preguntaba si de verdad estaban conscientes de lo que hacían, pero prefería no tocar el tema más de lo necesario. Era realmente extraño, pero de alguna forma muy sutil, obvia. Estaba en la perversa naturaleza del hombre…

Ninguno de ustedes podrá acabarlo si él no baja la guardia antes… incluso con la Inocencia destrozando su cuerpo, tiene la voluntad suficiente como para sobrevivir por más tiempo si se lo propone. La legión es poderosa, no deben subestimarlos.

Aquella voz espectral se hizo escuchar en la cabeza de la exorcista por encima del ruido producido por la descarga de la mujer y las palabras fúnebres del buscador maldito. Illya se tardó pocos segundos en reconocer al dueño de tal sonido, debido a que este en realidad, nunca había estado en frente de ella. Sólo en sus pensamientos. Hubiese querido exclamar “¡Eres el exorcista que los acompañó!” y decirle que nada de eso había sido su culpa, que era algo inevitable, pero algo le decía que el tiempo apremiaba y era limitada su capacidad para comunicarse con ella. Percibía en medio de todo ello, la estática perturbadora de sus esfuerzos por hacerse oír y más que eso, hablar sin que ninguno de la Legión le escuchase.

¿Es por eso que la Inocencia yace sometida bajo el yugo de Xavier?, ¿Porque la voluntad unánime de todas esas almas en pena la doblegan tanto a ella como a su…acomodador?

Si…

Todo tenía sentido ahora.

Hubo un momento de silencio, y cuando Illya pensó que el exorcista difunto y su voz se habían extinguido, él volvió a la carga.

Escúchame bien, no tengo mucho tiempo, así que seré breve. Lo que tienes que hacer es desconcentrarlo. Ellos te han escuchado, y te temen, por eso que has mencionado. Porque no habían sido leídos por alguien antes. Tú lo has logrado, por eso tienes la oportunidad de acabar con todo esto…

Espera un momento, ¿qué pasará con ustedes? Si logramos recuperar la Inocencia y darle fin a todo esto, ¿qué les deparará?

Eso no lo sabremos hasta que llegue el momento,—respondió al cabo de varios segundos el exorcista— pero si podemos con nuestro fin acabar con toda esta locura, entonces estaremos satisfechos.

Por un instante Illya pensó que él sonreía con cierto deje cansino, a pesar de que sólo lo escuchaba en su mente.

Debes darte prisa, exorcista Illya.

Gracias. A ti, y a todos los que depositaron su confianza en lo que hacías hasta el final.

La presencia del hombre se esfumó como el humo, en un silencioso siseo que se perdió de pronto en el aire.

En nombre de sus vidas no vacilaré. Illya se sentía solemne.

Creo que todo esto no ha sido más que una pérdida de tiempo —Xavier, chamuscado por dentro, con un muñón de carne sanguinolenta como mano, y el rostro inexpresivo, alzó la extremidad que sostenía la Inocencia, la cual prácticamente despedía humo al rojo vivo hacia el cielo.— haré caer el poder indómito del juicio final sobre ustedes. Serán el primer sacrificio verdadero en esta guerra, el inicio del verdadero final para todo esto.

Pero incluso antes de que el primer haz de luz se dibujase a partir del cristal martirizado, volaron hasta él, cortando el aire a su paso con un silbido, varias estacas que se clavaron en su cuerpo casi simultáneamente. El buscador fue empujado varias veces hacia adelante por la inercia. Oscuras manchas de sangre se salpicaron en el aire y mancharon la tierra desde todas sus heridas abiertas, incluyendo las nuevas. Fue hasta que escuchó de nuevo la voz de Illya, que su rostro se degeneró en uno lleno de rabia y quizá desesperación, emocionalmente pura.

Eso no es lo que han decidido todos, Xavier. Cuentas con el poder de la Inocencia pero, ¿qué pasaría si ésta se sale de tu control y decide castigarte?, ¿no has pensado en eso? Porque tanto como las almas del exorcista y los buscadores que se oponen, también está su voluntad, y cada vez grita con más fuerza. Sabes que no miento, ¿puedes escucharla, verdad?

Todo lo que había dentro del buscador se agitó. Dichas palabras parecían haber enardecido la voluntad de las almas opositoras y no solo eso, sino también de la Inocencia en consecuencia. Eso era lo que necesitaba el exorcista, que era en realidad quién se relacionaba directamente con el poder de Dios. El cristal empezó a emitir chasquidos, rechazando a Xavier, que comenzó a gritar de verdadero dolor por primera vez.

¡¡NOOO!! ¡¡SÓLO UN POCO MÁS!! ¡¡PERMÍTEME SEGUIR UN POCO MÁS, MALDITA SEA!!

Fantasmalmente, volvieron a escucharse una algarabía de ecos escandalosos, las voces de todos ellos, cuyas palabras no podían distinguirse correctamente. Se mezclaban con los alaridos de los opositores además. El juicio al final, parecía revertirse hasta ellos.

¡Ustedes! ¡No se queden ahí parados y hagan algo!, ¡Es nuestra oportunidad!

Gritó Illya que volvió a dispararle dos veces al cuerpo moribundo del buscador que se sacudió violentamente tras el impacto.
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Miér Mar 17, 2010 7:32 pm

La intervención de la nueva chica me molesto en gran medida, pero para colmar el vaso de la paciencia, la joven exorcista también intervino en la pelea que estaba llevando a cabo. Sentía deseos de coger a ambas y estrellarlas contra la vegetación que nos rodeaba, pero eso era algo que debía de esperar. Lo primero que debía de hacer, era el ocuparme del molesto buscador, el cual parecía sentir un gran dolor en su cuerpo.

-Malditas mocosas- dije apretando con fuerza la espada, -cuando acabe con él os daré vuestra recompensa, a la primera una muerte mas agonizante que a este idiota y a la segunda tal paliza que no la reconocerá ni el mismo komui- dije en tono enfadado.

Era el momento idóneo para canalizar esa rabia y ira que estaba sintiendo. Aproveche que el tipo llamado Xavier acababa de sujetarse con fuerza el brazo en el que tenia la inocencia, para asestarle un corte en el costado derecho.

El buscador levanto rápidamente la palma de la mano en la que estaba incrustada la materia divina, tratando de reunir las fuerzas suficientes para poder lanzar un último ataque. El brazo estaba extendido por completo hacia el cielo, pero en esa posición duro poco tiempo. Un corte a gran velocidad hizo que la mitad de su extremidad saliera volando no muy lejos del resto del cuerpo, mientras en la cara del hombre se podía ver una expresión de horro y dolor. Rápidamente comenzó a agitar su brazo hacia todas direcciones, manchando con la sangre que salía desde su interior como si de una fuente se tratara, bañando a los tres en ese liquido escarlata que tanto me gustaba ver.

-¡MALDITOS, OS DESEO LA PEOR DE LAS MUERTES!-

-Vamos vamos, si apenas has perdido un simple brazo- dije entre risas, -aun tienes más partes de las que separarte y por lo tanto también de más sangre- dije en un tono que reflejaba crueldad.

La cantidad de sangre que vertía disminuyo pero no se detuvo, aun goteaba de forma rápida, lo que hacía pensar que muy pronto acabaría desangrado y con ello se acabaría la diversión. Estaba claro, debía de torturarlo mientras podía.

Con otro corte de mi espada mandoble hice que la mano del otro brazo acabara de igual forma, pero para su desgracia no sería lo último que se desprendiera de él. Lo siguiente fue la oreja izquierda y después un trozo de carne del muslo derecho. El desmembramiento me estaba ocasionando tal placer y me hacía sentir tan bien, que me hacia recordar los tiempos en los que mataba personas y no esos seres metálicos que en algunas ocasiones llegaban a aburrir.

La sangre corría por la hoja de mi arma de igual modo que lo hacía por las partes de mi traje que fueron manchadas con esta. Mientras yo reía sin parar de la forma más macabra jamás imaginada, reflejando el sicópata que llevaba dentro, el mismo que siempre luchaba por salir.

-Esto te pasa por atreverte a atacarme y para colmo a hacerme varias heridas- dije en una entonación que reflejaba cierta alegría por la escena que se estaba viviendo.

El buscador se retorcía de dolor debido a las numerosas heridas que inundaban su cuerpo, las cuales le obligaban a doblarse mientras escupía la poca sangre que debía de quedarle dentro. Sus ojos aun reflejaban los mismos deseos de venganza que al comenzar el día, lo que significaba que si aun pudiera utilizaría la inocencia para llevarnos con él a la tumba.

Me separe un par de metros del hombre con la intención de darle el golpe de gracia, pero en ese instante los ojos cambiaron de dirección por puro instinto, como si ya estuvieran buscando a la siguiente presa a la que poder mutilar, y esa era la chica del paraguas. Estaba claro que era una enemiga y dado a que no tenia estigmas en su cabeza, deduje que se trataría de una de las personas a las que el conde les daba poder a cambio de ayudarle en sus propósitos.

Ciertamente parecía una presa que rogaba ser troceada, pero primero debía de terminar con el traidor, el mismo que había vivido tanto tiempo gracias a algo que no le pertenecía.

-¿Unas últimas palabras?-

-IROS AL INFIERNOS, PODREIS MATARME PERO NO SERE EL UNICO AL QUE OS TENDREIS QUE ENFRENTAR POR LOS MISMOS MOTIVOS-

-Estupendo, pues cuando venga le troceo de igual manera para que vuestras almas discutan a cual le dolió mas- dije sonriendo.


Off: Con todo mi cariño os dejo lo que queda para vosotras ^^
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Jue Mar 18, 2010 11:12 am

No pude evitar sonreír ante aquella escena final protagonizada por la chica maravilla y la Legión, estaba claro que no había ido tan desencaminada al pensar que podría provocar algo en el buscador que hiciera que perdiera la total concentración o más bien que al final, aquellas almas en pena que estaban en su contra lograran darnos el tiempo suficiente como para destrozarle.

Sin embargo otra vez el General de brillante armadura volvía a hacer acto de aparición amenazando a todo lo que respirara a un radio de 10 km a su alrededor (una ironía exagerada), no pude evitar sonreír, con una extraña mueca ante las palabras del general… Por muy asesino que fuera, empezaba a sospechar que él desconocía el verdadero significado de la agonía para los jugadores consecuentes como yo.

-Pobre, pobre general desorientado. –Solté usando la sombrilla para que la sangre de aquel buscador maldito no me salpicara, me era suficiente con la que había vertido, sin embargo no solo hice aquel movimiento rotatorio con la materia oscura para resguardarme, si no que lo hice para ocultar también el momento en que tomaba la inocencia que se había desprendido de la extremidad cercenada del buscador, como si por alguna razón la propia inocencia hubiera intentado escapar aprovechando la libertad que la mano muerta de aquellos le ofrecía ahora. La oculté dentro de los pliegues de lo que me quedaba de vestido, chasqueando la lengua inconscientemente por el dolor que empezaba a sentir de manera permanente en una zona cercana a mis costillas.

Si bien podría haberme planteado desaparecer de la escena, algo en todo aquello no terminaba de gustarme, quizás la manera en la que el general torturaba al buscador, a la legión. Las risas que profería el general me disgustaban, y la pregunta sobre si de pequeño aquel tipo era de los que de pequeños solían… sentir placer mutilando animalitos y demás bichitos, hizo que automáticamente una mueca de desagrado cruzara mi rostro durante unos segundos… Odiaba a ese tipo de sociopatas psicóticos y sádicos que solo tenían una manera de torturar a cualquier ser vivo.

Dejé escapar un suspiro a la vez que cerraba la sombrilla, haciendo que en la punta de esta saltaran varias chispas anunciando que la energía acumulada estaba a punto de liberarse para que la materia oscura no se sobrecargara. Acentué mi sonrisa, estaba claro que al general no le gustaba que se interpusieran en su presa, observé al buscador, el cual seguía gritando cosas que ya poco importaban, el final le había llegado, aunque empezaba a sentir lástima por el dolor que también le estarían infligiendo a aquellas almas inocentes.

Podría resultar hipócrita por parte de un aliado del conde, el cual su misión principalmente es deshacerse de inocencias, y exorcistas, sin embargo, muy pocas veces, en la vida de un amigo del Conde Milenario tenía la suerte de conocer a personajes que equivalían a ser sus contrarios, exorcistas en este caso, que valía la pena respetar y escuchar. Por suerte para mí, en lo poco que llevaba siendo aliada de quien era, había tenido la oportunidad de conocer a dos de ellos que parecían tener cosas interesantes para dar a ver…

Lastima, uno de ellos ya había muerto.

-Lo has hecho bien, has logrado aguantar hasta el final, exorcista. –Dije alegremente, saltando sobre el buscador, tomándole con delicadeza de la cabeza, ladeándola hacia atrás de manera que quedara apoyada en uno de mis hombros. –Pero ya es hora de que descanses, descanséis, en paz. –Concluí antes de descargar toda la energía que había concentrada en la punta de la sombrilla contra la legión, que salió en forma de rayo impactando contra su espalda y expandiéndose rápidamente sobre el resto del cuerpo como su fuera un manto de pura electricidad, aproveché para separarme varios pasos de él.

Algo ocurrió en ese momento, pues la energía que había tomado un color carmesí empezó a soltar chispas al entrar en contacto con algo, eran las estacas de color granate que habían salido de los rifles de la chica maravilla, que al entrar en contacto con su materia oscura creó una reacción extraña, parecida a una sobrecarga de energía, que terminó en estallido sordo que absorbió al buscador en una explosión de luz tan pura como carmesí, obligándome a entrecerrar los ojos para no quedarme ciega por la potencia de aquella detonación…

Hasta nunca, exorcista…
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Vie Mar 19, 2010 11:55 am

Se había acabado. Xavier había sido destruido. Illya lo supo en el mismo momento en que la energía de aquella mujer chocó contra sus Lacrime, las misma que entraron en reacción y explotaron llevándose consigo al buscador maldito. El estruendo fue lo de menos; la exorcista ya había visto muchas cosas en ese día como para sobresaltarse tras ver a un cuerpo que quizá, de todas formas iba a morir, explotar a su frente. Con ello, todas las almas se esfumaron. Ella sintió sus presencias flotar en el aire hasta desaparecer completamente. Por un momento miró al cielo y creyó atisbar el rostro de aquel otro exorcista, sonriendo, pero con una expresión algo preocupada. Illya ladeó la cabeza, ¿por qué?

Algo falta

Pero antes de poder explicarse ya había desaparecido, incluyendo su espectral y borrosa silueta a penas dibujada. La muchacha hizo una reverencia todavía observando el límpido cielo que casi por arte de magia comenzaba a despejarse. Las nubes grises marchaban hacia otras fronteras con un paso decidido, llevadas por el mágico viento que ahora soplaba.

De Xavier no quedó mucho. Sólo sus ropas, algunos restos esparcidos de aquí para allá y el brazo con la mano hecha un amasijo. Illya sentía la sangre escandalosa del buscador sobre el rostro y la ropa; la había bañado a ella también luego de que Socalo cortase el miembro y el líquido saliese disparado a chorro con presión. Una rociada caliente y viscosa.

Se dio el gusto de suspirar con alivio y dejarse caer de rodillas, sin pensar en nada en especial. Quizá con su mente revuelta, tratando de poner todo en orden nuevamente. Las imágenes de lo sucedido se repetían dentro de sí con cierta sensación de irrealidad, ¿de verdad habían pasado por todo eso?, ¿cuánto tiempo transcurrió después de que abandonaran la ciudad mexicana?

¿No te falta algo aún, Illya?

Ese pensamiento la hizo parpadear dudosa, ¿de verdad?, ¿pero qué? Miró a Socalo, tan sucio de la vital sustancia como ella, y luego a la mujer, que no parecía sorprendida ni aliviada, sino más bien… satisfecha.

Algo le llamó la atención entonces. Del brazo amorfo que había quedado de Xavier, no había más que piel, hueso y sangre coagulada. La Inocencia no estaba. Una descarga de adrenalina le recorrió el cuerpo entero al darse cuenta de eso. Sin pensarlo mucho volvió a levantarse de golpe con los ojos llenos de sorpresa e incredulidad.

General… ¿podría decirme dónde quedó la Inocencia? —porque había una Inocencia por la cual preguntar, ¿no? Después de todo él había cortado el miembro sin mucha dilación, y había estado presente en el momento en el que voló por los aires y…

Pero también estaba ella.

Illya entones miró con suspicacia a la mujer (la cual todavía desconocía su nombre). Si sus sospechas eran ciertas entonces podía caber la posibilidad de que ella…

Oh, oh


Última edición por Elipthi Khanon el Sáb Mar 20, 2010 10:54 pm, editado 1 vez
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Vie Mar 19, 2010 8:55 pm

Lo que quedaba del cuerpo del buscador estallo en mil pedazos esparciéndose por toda la zona, varias de las partes llegaron hasta mi, manchándome mas aun de la sangre y desperdicios que dejaron su cuerpo. Sin embargo no estaba molesto por eso, lo estaba por que una vez más se habían interpuesto en mi camino, esa maldita aliada había rematado a mi presa, aunque la forma de hacerlo en verdad resulto divertida.

-Tu...-

Las palabras de la exorcista me interrumpieron, haciendo que girara mi cabeza hacia donde se encontraba la extremidad cortada. En efecto no estaba, la inocencia que debía de estar en la mano cortada no estaba, pero si yo no la había cogido y por lo visto la joven exorcista tampoco, solo quedaba una persona que lo hubiera hecho.

-La tiene ella- dije señalando a la chica del paraguas, -no hay nadie mas quien la pudiera haber cogido, pero eso no es lo que más me interesa- dije con una amplia sonrisa.

Di un paso hacia delante aplastando los órganos caídos del ex-buscador, al mismo tiempo que me fije como uno de los ojos del difunto había ido a parar a mi hombro derecho. Recogí ese pequeño trozo humano y se lo arroje a la aliada.

-Una buena muerte, ahora tratemos de que la tuya sea mejor- dije ladeando la cabeza al mismo tiempo que colocaba una siniestra sonrisa en mi rostro.

Para mi desgracia antes de que pudiera intentar atacar a la chica, los akumas que habían sobrevivido a la última ráfaga de ondas verdosas, se colocaron a los lados de la chica de forma amenazante. Se podían distinguir cerca de quince niveles 1, diez del dos y ocho del tres, la suficiente cantidad para que desviara mi atención hacia ellos. Tenía pensado atacar a la aliada, pero lo principal era quitar a toda esa basura que no haría nada más que molestar, sería una ocasión para aprovechar que la entrometida exorcista se encontraba allí.

Me lance hacia mi izquierda para atacar a las maquinas que allí se encontraban, las cuales comencé a despedazar una tras otra. Mientras mi hoja cortaba la metálica piel que las componía, notaba como los golpes y en especial la herida del costado, comenzaban a molestarme, de tal manera que notaba como mi cuerpo era más pesado. Pese a todo no seria difícil acabar con esa pequeña cantidad de enemigos, solo era cuestión de tiempo y sobretodo de diversión.
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Sáb Mar 20, 2010 11:27 am

Después del haz de luz simplemente había quedado mirando aparentemente la nada, aparentemente todo había acabado, o al menos eso sentenciaba la quietud que ahora invadía aquella pequeña explanada a la que el buscador nos había llevado. Los escasos restos de aquel hombre poseído por almas que al igual que él se hallaron en pena y malditas, se encontraban esparcidos tanto por el suelo como en la ropa de los tres.

Fue entonces, cuando la chica habló que noté un peso descomunal en el costado izquierdo, caí en cuenta de que había tomado la inocencia. Sonreí levemente, dedicándome varios comentarios cargados de ironía… ¿Cómo había podido olvidar que había confiscado tan preciado objeto? La respuesta era fácil, el dolor, no era inmune al dolor, y me sentía cansada, podía notar que ya no me quedaba tiempo. Podría volver a perder el control.

Sentí como mi mano se movía de manera automática para atrapar el orbe chamuscado que había pertenecido al buscador. Era un acto reflejo del que no había sido consciente hasta que dejé caer el ojo al suelo, podía ser uno de los tantos regalos que me llevé conmigo de aquel maldito orfanato…

-… Dudo que pueda compararse mi muerte con la de un exorcista, señor Dorado. –Dije en un tono de ultratumba, un escalofrío recorrió mi espalda, chasqueé con la lengua molesta y buscando algo de concentración, no podía perder la cabeza, al menos no aún.

La primera explosión de uno de los akuma de primer nivel, logró traerme de nuevo a la tierra, tomé con fuerza la sombrilla, decidida a ignorar o preguntarme el porqué aquel pequeño bulto que llevaba conmigo se hacía cada vez más pesado, di media vuelta dispuesta a salir de aquella explanada aprovechando que el general estaba ocupado, con un poco de suerte la chica maravilla también se entretendría con los akuma.

Algo me dice que eso es prácticamente improbable… , me encogí de hombros dejando escapar un suspiro un tanto angustiado, sin embargo el sonido de algo parecido al trompeteo o chillido de un águila hizo que mi semblante cambiara a uno más serio, más molesto. -¡Tú solo sigue adelante!

Empecé a correr sin muchas ganas, así como se encontraba mi cuerpo se me hacía pesado y doloroso, sin embargo estaría mal y sería sospechoso no ofrecer ni un poco de resistencia, así que lo único que quedaba era seguir un poco el juego, antes de terminarlo.
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Invitado Sáb Mar 20, 2010 11:23 pm

La tiene ella —Contestó Socalo mientras señalaba a la mujer—no hay nadie mas quien la pudiera haber cogido, pero eso no es lo que más me interesa— agregó entonces con una sonrisa que a la exorcista se le antojó macabra.

Las sospechas de Illya entonces se hicieron certeras con las palabras del General. Ella también observó a la mujer con cierto gesto ansioso, como si estuviese a punto de ir tras la Inocencia corriendo hasta donde estaba. Sin embargo, nuevamente el exorcista superior tomó la iniciativa y dio señales de también querer intervenir, pero por fin, de una manera directa.

Insinuó deliberadamente sus ansias por destazarla aún de mejor forma que con Xavier, volviendo a explayar la sonrisa demencial y escalofriante en sus labios. Illya anotó mentalmente no entrometerse en esos momentos en los planes de Socalo, si es que no quería verse tan descuartizada como él quería a la aliada ahora.

No obstante las cosas cambiaron. El general no pudo ir tras la aliada, ya que fue interferido por varios grupos de Akumas (Illya tragó saliva al identificar varios nivel tres por allí, oponentes contra los cuales todavía no podía batirse –y vaya impotencia la que sentía sabiéndolo-). Todos se centraban en él, y parecían haberse olvidado de la exorcista mujer; dicha aludida que atisbó a tiempo a la mujer, quién salía corriendo, para comenzar a darle alcance.

¡Espera! —exclamó con osadía mientras también comenzaba a correr tras ella. Sintió una ligera sensación de Déjà Vu, la escena era idéntica a cuando Illya, quizá horas atrás, había ido tras Xavier, en su búsqueda.

La carrera transcurrió algunos minutos. Dejaron atrás al General y los Akumas, que todavía se hacían escuchar entre explosiones y alaridos de dolor por parte de las máquinas incluso hasta después de varios metros abandonándolos a su suerte. Illya de todas formas, aunque estuviese completamente atenta al ruido que se alzaba desde atrás, mantenía su mirada afilada fija en la espalda de la mujer. Ella también estaba algo cansada, no solamente física sino mentalmente. Las sienes le palpitaban y en los oídos le embargaba un pitido molesto. La frente la tenía perlada de sudor ante el esfuerzo de su vista, clavada con concentración.

Vamos, vamos, vamos… más rápido, le ordenó a sus piernas. Sin durar mucho comenzó a jadear, sintiendo los pulmones dolorosamente dilatados ante cada enorme bocanada que le exigían tomar.

Entonces, en su mente se dibujó una idea. Fue extrañamente espontánea, casi instintiva, y más raro aconteció la acción de Illya, que a su vez, no pareció dudar de aquel impulso eléctrico de acartonada forma en su interior.

Sosteniendo aún a Albtraum, unió ambos cañones de sus rifles, lado a lado, y empezó a cargar el poder de la Inocencia en su interior. Tardó unos segundos, en donde sintió la vibración de los mismos casi como un ronroneo salvaje. Entonces cuando todo estuvo listo, los dobló hacia atrás y disparó.

Divine Bianca!

La intensidad del disparo, que fue destinado hacia la nada, le dio el suficiente impulso como para acortar los poquísimos metros que la separaban de la aliada. En el proceso soltó su arma, y elevada en el aire, Illya extendió sus brazos como un verdadero lince a punto de abalanzarse contra su presa.

¡Detente ahora mismo! —fue lo que le espetó antes de tumbarla contra el suelo abruptamente.

No solamente fue eso, sino que sin darse cuenta, y en su forcejeo por tratar de arrebatarle la Inocencia, ambas rodaron varios metros hasta que llegaron inconscientemente a la pendiente de un barranco. En ese momento la ley de la gravedad se impuso despiadada, e hizo que se deslizaran por dicha bajada a velocidad vertiginosa.

Illya se aferró inconscientemente a la ropa de la otra mujer para no soltarse y ser disparada hacia otro lado. A pesar de que el impacto contra el suelo una y otra vez, entre tumbo y tumbo, doliese, no pensaba quitarse o alejarse de ella hasta quitarle la Inocencia. En su rostro se veía el esfuerzo que hacía, apretando los dientes y afilando la mirada como nunca lo había hecho… o como no lo recordaba haber hecho antes.

¡Suéltala! ¡Suelta la Inocencia, vamos! —exigió mientras aún continuaba descendiendo abruptamente con ella, rodando casi a ras del suelo.
Invitado
Anonymous
Invitado

Volver arriba Ir abajo

Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo] - Página 4 Empty Re: Misión a México. The True Exorcist [Illya Van Kindlmüller & Winter Socalo]

Mensaje por Contenido patrocinado

Contenido patrocinado

Volver arriba Ir abajo

Página 4 de 5. Precedente  1, 2, 3, 4, 5  Siguiente

Ver el tema anterior Ver el tema siguiente Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.