Misión a Yamusukro [Joey Jordison-Jung Reng]

Nada más llegar, el carro despojó como quien dice a Joey, mientras que poco a poco llevaba sus cantimploras, repletas de agua por mitad del árido lugar.

"Más seco que una vieja" -pensó Joey mientras miraba a su, todavía sin nombre, compañera-.

- Joey, soy Joey...

El exorcista caminó hacia ella, para comenzar a comentarla a ver que podían hacer allí, si investigar algo primero, o simplmente acercarse hasta el lago a ver que era lo que pasaba y luego sacar un par de conclusiones.
Joey seguía mirando a todos lados, el lugar desértico, seco y con un molesto calor que azotaba su cabeza desprotegida.
De pronto, soltó sus provisiones, básicamente, en forma de líquido, pues el informe auguraba que iban a pasar sed, y comenzó a quitarse la camisa de Exorcista a la vez que hacía varios nudos en ella. Al final: algo así como algo que le pudiera cubrir la cabeza sin molestarle mucho.
Al descubierto, su camiseta negra, típica en él.

- ¿Y bien? Cuál es tu nombre, si puede saberse.

Si no se habían hablado en todo el camino, había que empezar a hacerlo, y que mejor manera que gastar sus energías hablando para compenetrarse mejor después en batalla o lo que surgiera.

al llegar, ya podía ver que hacía un color infernal, sin más animo que el de estar en el peor lugar jamas imaginado, comence a caminar.

-¿eh?...-el que se presentara me llego de improviso, por lo que no pdía contestar muy rápido-lo siento.... un gusto Joey... soy Jung Reng fau -

mire en todas direcciones, suspire, esta misión iba ser muy tediosa, seguro que si.

-creo que lo mejor sería recolectar alguna información relacionada con lo sucedidio en el lago antes de ir a ver como esta el lugar afectado-comente como si nada, mientras me hacia una coleta alta por el calor que había-no me gusta, actuar sin información y sin conocer el lugar en el que estoy trabajando así que mejor ir a haber que podemos descubrir del lugae y si ha habido extraños sucesos... quizás y quién sabe haya akumas que nos puedan entretener-termine con una gran sonrisa mientras seguía avanzando por el lugar que parecía ser el pueblo más cercano.

Joey, cogió las cosas del suelo después de que Jung se presentara. Todo el nombre que le había dicho... era demasiado largo como para que pudiera acordarse de él entero, así que, con Jung se iba a qedar, y no había vuelta atrás en esa decisión.

- Pues venga, caminemos pues...

La gata de Jung no parecía moverse, pero, seguro que alguna razñon tenía, porque, aunque fuera una Inocencia animal por su apariencia, seguro que seguía un poco su instinto aún algo independiente.

Joey, tenía la espalda muy cargada: cantimploras colgando dentro y fuera de una mochila con un carcag de flechas y su arco acomodado como buenamente podía. si ahora tubiera que prescindir de algo, por mucho que le siriviera luego, el agua sería lo primero.

- ¿Y bien? Parce que te va a gustar que haya akumas por aquí, aunque, no me extrañaría nada sabiendo lo que ha pasado.

Joey al respecto, le gustaba jugar con ellos, haciendoles buscarle, o algo similar para que pudieran mosquearse o enfadarse algo, con lo que siempre era algo un reto, y un divertimento esas máquinas tan simples.
A lo lejos, gente con lo que parecían cántaros de agua, pero que, solo por deducción estarían vacios porque vendría todo el agua del lago, o quizás no.

- Les preguntamos y nos vamos, que nunca me ha gustado mucho la gente.

a cada paso que daba me preguntaba quien era más dado a la comunicación o era más simpaitco, su maestro o este nuevo compañero.

-como van las cosas quien sabe-murmure mientras lo veía cargar con demasiadoas cosas-vaya al paso que vamos moriras por agotamiento por llever tantas cosas que los demás, oh bueno... -

encontes compare la simple y sencilla mochila que llevaba a los hombros donde estaban m,is proviciones y otras cosas más.

-HItomi vanzaba...-llame a mi gata que se había quedado detrás nuestro mirando a la nada-venga... y claro que me gustan los akumas a ¿quien no? es genial ver como se van destruyendo por idiotas... -comente esperando a Hitomi

mi gato simplmente avanzo hasta donde me encotraba y salto hasta mi hombro izquierdo donde que quedo tranquilamente, observe a mi compañero que miraba hacia dnonde había gente, al parcer transportando agua o éspro que eso sería.

-vamos a obtener información-dije de forma sarcastica a ver como actuba de forma arisca frente a la gente, ya casi parecía ser un gato, una leve sonrisa apareció en mi rostro.

el pueblo, no era más que desierto, auqneu sonra tonto era la verdad, el lugar carecía de algun leve color verdo y algo que se le asimilara, las casa creadas para para soportar la adversidad del desierto se mostraban más secas y descoloridas de lo que uno se imaginaba, las calles polvorientass y vacias indicaban que el lugar era practicamente desabitado y solo algunas personas se podían apreciar que pasiaban por el lugar a simple vista y bajo ese odioso sol, avanzamos unos metros cuando Hitomi empezo a actuar de forma singular, al parecer estaba inquieta.

-oh.. vaya...-exclame escondiendo mi emoción meintras me dirigía a la primera persona que vi, una mujer de no más de treinta años, vestida completamente de ropas color arena largas.

-disculpe-llame suavementem ientras me acercaba, la mujer solo levanto la vista y al parecer asustada por que viro de inmediato a ver a Joey-no se preocupes.... solo queremos hacerle unas preguntas-

la mujer parecía no calmarse, pués aún no apartaba la mirada del chico detrás mio, di un suspiro... solo queriamos hablar.

Ante la asustada mirada de aquella mujer, Joey solo pudo reaccionar de una forma: un corte de mangas sería algo que a él le gustaría hber hecho, pero solo se quedó en sacarle la lengua para que encima, a la pobre mujer, le entrara aún más miedo.

- Pues si que... hay que joderse...

Típico de él. No le gusta a la gnete, a empezar entonces a ponerles a parir o a insultarles. Ya en él era algo normal, pero para otras personas, pues no sería tan cotidiano blasfemar así de buenas a primeras.

- Vaya con la mujercita... me mira mal y todavía...

Estaba quieta, hipertérrica *parada* allí de pie, sin moverse ni un solo músculo y con los ojos abiertos como platos. Joey metió la lengua dentro de su boca pues el calor evaporaba su saliba rápido y no quería que se le quedara muy reseca.
En cambio, para seguir con provocaciones hacia la mujer, Joey tiró todo, incluso su arco, al arenoso suelo, del cual salió una pequeña nubecita de polvo. Agresivo como de costumbre fue hacia la mujer con paso firme y decidido mientras ella poco a poco se apartaba. Finalmente optó por correr, y Joey, no es que andara con mucho talante como para ir detrás de nadie que se quedara patidifuso mirándolo.
¿Por qué corrió? Fácil. Si no era ya suficiente sus pintas, Joey se tiró a mitad la chaqueta de Exorcista, aprentándosela en la cintura para no perderla, mientras que a la vez, fruncía el ceño y ponía una mirada, no muy amigable.

- Se asustan por nada.

El Exorcista se encogió de hombros simultáneamente a que abriera los brazos como en plan de: ¿pero por qué me huyen todos?
Con la cara normal, sin ningún rasgo apntado ni nada por el estilo, se dirigió hacia Jung y siguió hasta volver a coger su arco, y un 2 cantimploras, sigiendo el consejo que le dio anteriormente.

- ¿Tan feo soy, o qué coño pasa?

Muy claro. Le gustaba decir las cosas como eran, pero... en aquel momento solo bromeaba sobre su aspecto, ya algo más lúcido que el de la Orden recien despierto.
Cambiando de tema. Si aquella mujer no lo recibió muy bien, habrñia que buscar alguien que solo sintiera curiosidad y no un mieda petrificador como el que pareció poseer a la mujer.
A Joey se le ocurrió una idea, pero... parecería algo ridícula y la usarñia como ultimísima opción: dar agua de las cantimploras de la mochila restantes a quienes les dieran información, pero, tenía que ser valiosa, y sino... ni un trago.

Tomando esta vez la iniciativa, Joey se acercó a algunos ancianos, que de primeras, parecían bastante normales y no ponían caras raras al ver a Joe, aunque quizás por dentro se estubieran pensando algo seguro.

- Ejem ejem... Perdonen -toda la tos y aquel "perdonen" sonaron forzados, pero... era por una buena causa- ¿podrian decirme a ver si a pasado algo extraño por aquí últimamente además de la desaparición del lago?

- ¿Qué dices? -el que parecía de mayor edad respodió-.

- Mierda, uno sordo... -Joey hizo un gesto con la mano como de no haber dicho nada en absoluto-.

El anciano se reposó sobre el respaldo de la silla en que estaba sentado en plena calle. Otro señor de casi la misma edad le hizo un gesto a Jooey, para que se acercara. Parecia alguien sabio, pero a saber, que allí cualquiera podría decirte algo tal que así:

- Tememos que haya sido el dios de la lluvia -Joey miró hacia el cielo, como si nada más empezar el anciano a decir aquello, ya se estubiera cansando de oirlo- Hace tiempo varios de nosoros fueron a cazar, y no volvieron con su presa para la ofrenda que hacemos siempre para que llueva algo, y a cambio, parece ser que nos a privado de el agua que necesitamos tnato del lago.

-Y bien... ¿dónde fueron a cazar? Porque nos sería de ayuda saberlo.

- Aquellas montañas de allí, una aglomeración de tres de ellas, fue donde marcharon - se veían 3 montaños algo a lo lejos-.

Joey, sin decir nada, se marchó de allí esperando que el anciano no le diera más la tabarra, así que llamó a Jung para que se acercara a él y le señaló las montañas. En las tres debían de haber algo, seguramente, Akumas.

mire asombrada como Joey sacaba la lengua cualsi fuera un niño, pequeño burlandose de otro, para luego empezar a hablar con no muy buen vocabulario, contuve una leve sonrisa cuando hizo el acto completo de chico malo botando todas sus cosas al arenoso suelo, más para leugo hacer huir a la mujer.

-mierda.... se fue-murmure al verla huir espantada.

- ¿Tan feo soy, o qué coño pasa?

-jajajajaja-me reí divertida por sus reacciones-eres el ser más extraño que jamás haya pisado estas tierras seguro-comente al momeot que detenía mi risa, no era una risa burlesa o del tipo sinica solo era una simple risa por su forma de actuar.

Joey camino hasta un par de anciano solo lo vi de lejos, para luego de no más quince minutos decirme que iriamos a unas montañas.

-genial ahora de alpinistas vamos-me queje mientras emprendiamos el viaje a traves de aquel fastidioso lugar dejando atrás el pueblo de los asustadizos-me voy a asar con estas ropas...-

deje mi mochila en le suelo y me saque mi chaqueta de exrocista y me la anude a al cintura como Joey, ahora tenía una sola blusa fina negra. caminabos bastante tiempo estimado, no tenía idea. pero el simple viaje ya me estaba fastidiando por el calor insoportable que hacía en esos momentos. las montañas parecían estar cada vez más cerca.

-al fin-exclame cuando ya estabamos en ellas y observe todo el lugar.

el paisaje que nos rodeaba no era más que arena, rocas y algunos cactus esparcidos por varios lugares.

-esta claro que este lugar no es el más vivo que digamos-ironice mientras me hacia una idea de como actuar en el terreno actual-hmmm... el terreno no es muy firme... peor puede soportar decentemente una lucha, no muy extendida-

el lugar parecía carente de vida animal, era extrañdo dado que aunque fuera un lugar practicamente olvidado por hombre y el agua, másde algun reptil devería haber pero de eso ni rastro.

-¿eh?... ¿que es esto?-algo había llamado mi atención, me acerque con cuidado y lo examine eran los resto de ropas de una persona, seguramente muerto por algun "animal extraño"-joey... mira lo que encontre... rastro de una persona-

le mostre las ropas gastadas por la luz solar más que nada, avance unos cuantos pasos pero el gruñido dem i gata hizo que me detuviera, teniamos viitas.

-¡llegaron los invitados!-grite mientras corría por mi gata y me ganaba en pocición de defensa sacando mis armas.

y era cierto frente a nosotros se podían ver varios akumas nivel unos y unos cuantos nivel dos listos para atacar.

-que empeice la diverción-comente lanznadmoe la ataque y de inmediato destruir a uno de los niveles uno qeu estaba más cercano a nosotros.

"No se anda con miramientos, no"

Joey se quedó bastante sorprendido al verla aniquilar enseguida a un insignificane nivel 1. Iba a ser rápido todo aquello, ymás aún con Jung, que así por la bobada, ya estaba peleándose.
Joey no quiso quedarse atrás, así que, hizo lo propio: cargó el arco con 3 flechas y las lanzó al aire, a los Akumas que estaban absortos con la aparición en sus campos visuales de Jung.

- Pero déjame algo!!

Joey vociferaba cual poseso cazador para que le dejara algo de presa su compañera. Acto seguido, tras acabar sus palabras, las flechas cayeron hacia abajo con gran fuerza, e impactaron en 2 akumas, ya que 1 flechas falló por el simple hecho de que una pequeña ráfaga de viento la desbió.
No contento con esto, buscó algo mejor, algo que le diera emoción al asunto: un nivel 2.
Uno le valía, pero varios, si se juntaban, le causarían problemas, y serios, a no ser que Jung le ayudara.
Joey consiguió ver uno cerca y le disparó una flecha de simple advertencia a su cuerpo. Tenía la forma de un animal híbrido, algo así entre un perro de pradera y lo que podría ser una ardilla... pero junto, y a lo grande.

- Pero mira que eres feo, cabrón.

Joey se rió en su cara para enfadarlo, aunque quizás no le convenía hacerlo, porque no sabñia que poderes tenía. El Akuma se giró completamente cabreado y con una cara, algo extraña, pues estaba enre una sonrisa, y comenzar a enfadarse sobremanera.
A gran velocidad se acercaba a Joey pero éste estaba lejos de él y tenía ventaja de poder cargar el arco y dispararle. Justo eso hizo: volvió a argar el arco, y disparó 2 flechas le le iban a la altura de la cadera y otra a la altura de la cabeza, para ver qué hacia.

salte esquivando los disparos de los akuma nivle uno que habían cerca, y aterrice en el suelo alejado de joey.

-pues intenta hacer algo-le conteste a su demanda de que le dejara algunos akumas.

sin más un nivel dos que tenía forma de oso de peluche mal cocido y deforme me ataco, aprovechando mi distracción que tenía por haber respondido a mi compañero, esquive el ataque mientras colocaba mis espadas adelante mio.

-no es de gente interrumpir las conversaciones-asegurem ientras me lanzaba otro de sus golpes que esquive rápidamente, mira a mi alrededir, unos cinco nivel dos y unos diez nivel uno eso era todo lo que había.
-si no quieres que te golpeen no te distraigas exorcita-me respondio el oso ese.
-je... esta cosa habla-respondi dando un salo y ganandome en la cabeza de este, y antes de que pudiera reaccionar un golpe certero de mi espada derecha lo partio por la mitad.

De inmediato, salte y cai sobre uno nivel uno que estaba por atacar a joey que se veía muy divertido con un nivel dos.

-huyyy... que feo ese-dije a la nada, mientras enterraba mi espada en el akuma que me servía de soprte y caía limpiamente en el terreno-bien.... dos menos...-

esquive le golpe casi certe de otro nivle dos, mire con desgana a este que tenía forma de humanoide pero que en vez de manos traía unas grandes hachas, dispuestas a aniquilarme si fuera posible.

-muere exorcista-me grito moviendo sus hachas en todas direcciones como loco, me cubri con ambas espadas recibiendo todo el golpe en ellas y rapidamente le corte una de sus hachas, el akuma gritto de dolor pero protno se recurpeo.

-wouw... recuperación rápida-silbe sorprendida, para luego cotarle la otra mano-pero eres bastante facil de leer... ahora muere-dijem ientras osnría y le enterraba en toda la cara ambas espadas.

la explción levnaot un tanto de la arena cercana que nos cubrio, para cuando me di cuenta estaba rodeada de dos akumas nivel dos dispuestos a matarme allí y de la forma más lenta posible.

-jajajajajajajajajajaja-grite con fuerzam ientras los miraba-¿creen que ustedes podrán contra mi?....-

esto se ponía emocinante, no pude evitar soltar otra risa sadica al ver a esos dos frente mi.

Joey, impresionado realmente por los detrozos que Jung estaba haciendo, volvió a cargar el arco mientras las dos flechas que disparó hacía apenas un segundo llegaban a impactar sobre el horrible Akuma, aunque, solo le dio una, pues seguramente el maldito Akuma prefirió que fuera golpeado en la cadera y no en la cabeza.

- Serás...

Otras dos flechas surcaban el aire hasta volvera impactar en aquel Akuma sin que pudiera hacer nada al respecto. Ésta vez, sus objetivos fueron lo que parecía una pierna y lo que buenamente podría llegar a ser el pecho de su apariencia animal.

El Akuma, poco a poco, se veía que iba más lento por recibir los golpes de las flechas así, de este modo. Joey, ya cansado de tener que dispararle mulititudinarias veces para poder herirlo o matarlo, adoptó una postura de forma que su pierna izquierda se apoyó completamente en el suelo y la derecha estaba doblada, en una posición que pudiera aguantar la fuerza con que la flecha sería lanzada. Joey tensó el arco lo máximo que pudo, y acto seguido, sin esperar ni un solo segundo a pensárselo, soltó la cuerda de su flecha, dejándo volar la saeta hasta volver a dar al Akuma, ya bastante dolido por cierto por los golpes que recibió, y más aún tras este golpe, que le dió de lleno en el cuello, haciendo saltar algo de forma indefinida hacia atrás, como por efecto del golpe.
Indefenso ya, el Akuma cayó al suelo, y Joey fue a examinar lo que había caido a lo lejos.
No era otra cosa que "piel" del Akuma que aparentaba ser muy dura, y había saltado algo a base del ataque de Joey, que le perforó enteramente el cuello.

- Ala venga... más... quiero más!

Más es lo que venía por delante suyo disparándo proyectiles morados: 2 Akumas de nivel 1. Demasiado fácil para ser verdad, pero... mejor que que los matara Jung ya era, porque al menos, se divertiría algi más, con esas dos estúpidas máquinas.
De nuevo, cargó otra flecha, solo una. La disparó sin apuntar mucho y gracias a ello, falló por un milímetro de no haber sido que el Akuma lo esquivó.

los akuma nivel dos parecían molestos por la burla que les había jhecho, por que se habían lanzado directamente contra mi.

esquive ambos golpes dando unos cuantos saltos hacia atrás quedando distanciados de ambos, los dos nivel dos que tenía frente a mi eran como parte de un solo ser, uno traía una espada en sus manos y el otro parecía que tenía...

-¿un martillo?-exclame extrañada por la forma de este último-oh... ahi vienen de nuevo-

nuevamente habían lanzado su ataque en conjunto, que nuevamente esquive pero esta vez sin alejarme de ellos, sus movimientos aunque sincronizados eran demasiaod lentos y muy faciles de esquivar por lo cual solamente necesitaba un momenot para poder eliminarlos.

-maldita exorcista-esclamo el de la espada ya arto de que no pudiera darme ni un solo golpe con su gigantesca espada.
-oh... vamos ¿eso es todo lo que tienen?-exclame sorprendida-pen´se que tendrían más fuerza.... pero bueno...-encoji los hombros y de un momento a otro salte por encima de uno de akuma quedando a espaldas a él.
-fin del juego-murmure y enterre una de mis espadas en la espalda de este, atravezandolo tan solo con el primer golpe.

el otro akuma miraba molesta la destucción de su "gemelo" y con un fuerte grito de fuera quizás se lanzo de inmediato contra mi, la acción habia sido rápida por lo cual había colocado mi espada libre como escudo para recibir todo la fuerza de los golpes de aquel martillo.

-maldita te voy a destruir-gritaba dando fuerte golpes sobre mi espada.

solamente podía reír de la forma en que esta arma se molestaba, así que en el momento que levanto su martillo para dar otro golpe, yome escurri del lugar como gato y quede a un lado de él.

-no sabía que eras sensible-y antes de que pudiera reaccionar yo ya le había cercenado la cabeza de un limpio corte.

más tranquila observe como Joey acaba con el nivel dos que quedaba y exigía más, para luego acabar con dos nivle uno.

-oh... solo quedan ocho y son nivel uno-mire el entorno para ver y solo quedaban las grandes y lentisimas maquinas nivle uno-bueno.... terminemos esto y vemaos lo que hay por aquí...-

active nuevamentem inocenica y las cuchillas de mis espadas brillaor nde verde para luego formas las caracteristicas cuchillas de las mantis, así aproveche la raídes que la inocencia me proporcionaba y me acerque a un par de akumas que estaban a punto de atacar a mi compañero. y con dos simples ataques fueron destruidos, qudando yo a un lado de Joey.

-¿te ayudo o te dejo solo los seis que quedan?-pregunte señalano a las masas cercanas a nosotros.

OFF: Siento la matanza... digo, si... la matanza... u.u
Joder... tanto pensar en sangre obstruye la mente a un vocabulario algo restringido u.u
Quise decir tardanza... *si claro... eso dicen todos...*

ON:...


Joey consiguió oir la voz de Jung entre el ruido de las torpes máquinas. Toda ayuda dicen que es poca, pero... en éste caso, quizás no fuera así, pues Jung se habría quedado de lo contrario con toda la diversión.

- Por favor... si te has puesto a caldo ya...

Gran exageración por parte del Exorcista, ya que para él ponerse tibio a matar Akumas, al ser divertido aunque fuera cargarse un par de ellos, sería algo así como un no parar de aniquilación de lacallos del Conde.

- Aunque... ni se te ocurra cortarte un pelo.

Bastante claro. No iba a dejar que su compañera se aburriera mientras él acababa de disparar algo lento a los Akumas restantes, a los que por cierto, disparaba de una flecha en una flecha para no gastar toda su munición con aquel pequeño regimiento.

- No pienso entretenerme con ese que tienes a las espaldas... así que...

Modestia. Carencia de ella se podría decir que "tenía" Joey, quien, dicho eso se puso a caminar hacia delante, donde todavía quedaban otros dos Akumas.
De nuevo, como siempre hubo hecho, cargó otra vez dos flechas, después de haber lanzado ya varios ataques de una sola flecha. Con ello quería acabar con los dos Akumas de cerca de a unos 10 meros delante suyo. No es que estubieran distraidos o algo parecido, sino que les pilló por sorpresa, que después de andar tranquilamente unos pasos, Joey cargara el arco tan veloz y por tanto, se vieron impactados por las flechas segundo después de hacer varios disparos que quedaron bastante cerca de Joey a decir verdad.

- Cabrones...

Joey se sacudió la ropa un poco del polvo que pudieron levantar los proyectiles de color púrpura. Después de ello, se dio media vuelta otra vez hacia Jung y la animó para que matara ya al último que quedaba después de todo aquello, que no duró más de 5 minutos.

-oh... como quieras-dije al ver que me dejaba elúltimo akuma.

camine hacía la maquina que quedaba allí y le lanzaba una de mis espadas con tal fuerza que lo atravezo, dejando una gran exploción, con tranquilidad llegue hasta donde estaba mi arma y la levante con demaisaoda tranquilidad, todo el lugar tenía indiecios de la batalla recién realizada, suspire y ajuste el abrigo de exorcista mi cintura otra vez así como arregle el cabello que estaba apunto de salirse de mi cola.

- está claro que los akumas deben estar buscnaod algo-hable aburrida de que todos los akumas fueran destruidoos-bien aquí ya no debe quedar nada... y sabemso que hay akumas en la zona así que... ¡vamos al lugar donde estaba el lago!-

aplaudi emocionada mientras daba un pequeño saltito de felicidad, si iba a ese lugar, podría o una, terminar rápidamente la misión esta e irme de este infierno o dos disfrutar matando akumas, así que sin esperar alguna reacción de animo de mi compñaero lo tome de uno de sus brazos y camminamos de regreso al pueblo para así poder ir a ese mencionada lago.

Joey, casi arrastrado por Jung, andaba a trompicones, pero de una manera algo contenta, pues parecía que a ella le entusiasmaba la acción, al igual que a él tambien.
Dirigiendose al lago seco repentinamente descrito en la misión, Joey pudo darse cuenta de que algo no iba bien en la zona.
De poca gente que había estado allí antes, ahora se veía mucha más, cosa que no podía ser en absoluto buena.

- Me parece que esto va a ser una fiesta -dijo en tono algo sacástico-.

A primera vista si que lo parecían, pero... si se ve justo como un Akuma se transforma en su apariencia humana... como que no es muy normal por así decirlo.
Joey señaló hacia el recien convertido Akuma para que Jung se enterara de los que pasaba.

- Hay tienes la puta prueba...

Joey cargó el arco, pero esperó a que Jung dijera si atacarles, o más bien esperar, ya que era una gran multitud, sin exageraciones. Casi medio pueblo debía estar allí convertido, y eso... no era nda bueno, ni para el pueblo adyacente, ni para los propios Exorcistas.

- ¿Esperamos o que dices, gatito?

El diminutivo de aquella criatura sonó raro en su voz, algo grave para su edad. Se decía que los gatos, tenían ese sentido que tambien les hacía presenciar el peligro, así que... nadie mejor que él para dar una opinión, aunque fuera con un simple maullido.

habiamos recorrido ya bastante y estabamos próximos a llegar la lago seco, cuando Joey señalo a practicamente la mitad del pueblo en el que habíamos estado anteriormente, transformados en akuma.

-por eso esa mujer huyo así cuando te vio-murmure a mi compañero al ver toda esa gente reunida-vya, vya... esto será interesante-

- ¿Esperamos o que dices, gatito?-

mire incredula a Joey y luego a mi gato, al ver como este le practicamente pedía una opinión.

-¿le estas pidiendo la opinión a un animal domestico?-dije sorprendida, mientras mi gato saltaba a mi hombro y miraba fijamente am i compañero-vale... lo se...-murmure molesta mientras jalaba del brazo (nuevamente) a mi compañero y lo llevaba a unas dunas más cercanas para poder ver lo que hacían en el lugar y así poder pensar en alguna forma de atacar.

mire cuidadosamente el lugar, la mayoría parecían ser denivel uno, peor eso no quería decir que fueran faciles de derrotar ya que la cantidad de aquellas armas basicas era impresionante y aunque fueran del nivel uno, el numero era demasiado para un solo exorcista, además había unas cuantas nivel dos.

-pero... aún... hay algo que falta aquí...-murmure observando a todos lados-falto algo y no lo puedo encontrar... demonios-

mi gata había dado un leve maullido e señal de comprender la situación.

-lo se... debemos eseprar un poco-comente acariciando la cabeza de la gata, para tranquilizarla-debemos pensar bien la estrategia... es demasiaod complicado y hay muchos de ellos.... lo que má me molesta es que siento que falta algo en este lugar... pero no lo hayo...-declaroe molesta mirando a Joey